En las elecciones presidenciales del próximo 7 de octubre no habrávoto castigo. No será si sale reelecto Chávez o se imponga Henrique Capriles Radonski, según la apreciación de Luis Vicente León, director de Datanálisis.
El candidato presidencial de la Unidad es una alternativa distinta a la del mandatario.
En las elecciones primarias fue inaceptable la propuesta de los radicales que enfrentaban a Chávez.
León fue el primer expositor del evento corporativo Reto Empresarial, realizado ayer en el Lidotel, patrocinado por la empresa &D Conference en asociación con SAC y EL IMPULSO.
El directivo de la encuestadora Datanálisis dijo que la contienda electoral se había desarrollado con gran expectativa.
Pero, la recaída del Presidente de la República fue similar a lo que pasaría cuando en una discoteca el disc-jockey le subiera el volumen a la música.
Comenzaron los rumores sobre la enfermedad, de la cual hasta ahora nadie sabe nada porque no hay un informe médico; y de los posibles sustitutos.
La campaña arrancó definitivamente los días 10 y 11 cuando se inscribieron los candidatos y apareció Chávez diciendo que estaba libre de cáncer.
Aunque hasta entonces el candidato oficialista había sido vendido como un moribundo, reapareció como un toro; pero, en comparación con el año 2006, era un líder deteriorado.
Al ser realizadas las encuestas, el porcentaje de las personas que no respondieron si votarían fue del 31 por ciento en mayo pero, en agosto, bajó a 19 por ciento.
Generalmente, quienes no responden no lo hacen por miedo; pero, cuando votan, ejercen el sufragio por el candidato de oposición.
Para los especialistas en la materia electoral hay tres grupos de electores:
1) Los que creen que la votación será cerrada y estiman que la diferencia será de 5 ó menos puntos.
2) Los que dicen que Chávez va a ganar cómodo.
3) Y los que dicen que es imposible que con la ineficiencia del gobierno pueda Chávez volver a ganar.
No es un error, ni una omisión por parte de Capriles enfrentar a Chávez por los problemas que se han presentado en el país, como la caída del puente de Cúpira, la situación de la cárcel de El Rodeo y la tragedia de Amuay.
El candidato opositor quiere demostrar que por encima de esas circunstancias, su oferta es diferente a la del Presidente que aspira a la reelección.
Las dos formas de hacer cambios
En esta campaña, Henrique Capriles Radonski, quien es un político joven y se suponía apelaría a la tecnología para hacer llegar su mensaje, ha recurrido a la forma tradicional de buscar la presidencia de Miraflores: el tocar y dejarse tocar de la gente, recorrer pueblos y ciudades, demostrar estar en perfectas condiciones físicas.
Aunque Chávez también ha tenido algunos contactos con sus partidarios, la mayor parte del tiempo ha venido utilizando la televisión.
Foto: Jairo Nieto