La gran mayoría de los venezolanos tiene un familiar, un amigo o un conocido que padece de la falta de medicinas e insumos médicos para diversos tipos de tratamientos.
Con el pasar de los días, es más común encontrarse con historias como la de Luisabeth Pernalete, un venezolana que el día de hoy dejará quien sabe hasta cuando de suministrarse su dosis de insulina, que como ella misma dice, la ha “inyectado de vida”.
Luisabeth padece de diabetes tipo 1 y hasta el día de hoy le alcanzó la insulina, “Con mucho dolor y sentimiento, hoy me despido de la insulina #Lantus. Hoy sólo me colocaré 15 unidades (deberían ser 30) que es lo que le queda al vial”, colgó en su cuenta de la red social Instagram.
Por más de 10 años, esta católica “dulce como la miel 1”, (así se define en su perfil), asegura no querer culpar a nadie pero debe hacerlo, “el Estado tiene la culpa de no liquidar divisas para este insumo necesario para estar viva y poder controlar mi condición”.
Asimismo, culpa a “Maduro y todos su clan”, por llevarla al deterioro y estar más cerca de poder morir, “Dios te perdone por tantas cosas malas porque yo no te perdonaré”, sentenció.
