A las 11:30 de la noche del lunes, cinco sujetos malintencionados ingresaron a la casa de un anciano de 87 años de edad ubicada en la avenida Don Felipe Parra en El Coriano II, oeste de Barquisimeto.
Era la segunda vez en una semana que el señor era víctima de un robo en su vivienda. Cuatro días antes, los antisociales entraron, lo amarraron y se llevaron varios objetos de valor. Esta vez el anciano estaba “preparado”.
Cuando sintió el ruido de los delincuentes, desempolvó una vieja escopeta que guardaba y la descargó varias veces para ahuyentar a los ladrones, cuatro saltaron las paredes y se fueron, pero un joven de 16 años de edad fue afectado por la descarga en el pecho y quedó muerto en el sitio.
Relataron los vecinos que no quisieron asomarse a ver lo que había sucedido por temor, pero al amanecer, vieron a los efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana en la casa del vecino, de apellido Sotero.
Se supo que fue trasladado al punto ubicado en El Coriano y luego entregado a los funcionarios de la División de Homicidios del Cicpc.
Los vecinos de Sotero señalaron que es un hombre dedicado a su trabajo en una arenera, lo único de valor que posee es un camión en donde hace los viajes.
El octagenario no cesó en sus labores pese a su avanzada edad pues tiene un hijo con condiciones especiales a quien debe atender. El muchacho estaba en la casa cuando ocurrió el robo pero dormía en otra habitación.
Familiares del adolescente aseguraron que el joven no estudiaba y andaba con malas amistades. Trascendió que uno de sus tres hermanos está privado de libertad en Uribana.
