Argentina y Brasil apostaron porque Venezuela halle un “camino de conciliación” en su situación y coincidieron en la necesidad de dotar de mayor dinamismo al relacionamiento externo del Mercosur, en particular en la concreción del acuerdo comercial que se negocia con la Unión Europea.
“Venezuela está en una situación crítica”, consideró hoy ante la prensa en Buenos Aires el nuevo canciller brasileño, José Serra, que eligió Argentina para realizar su primer viaje al exterior desde que Michel Temer asumió la Presidencia interina de su país, mientras Dilma Rousseff es sometida a un juicio político en el Senado.
En una “provechosa visita”, según sus palabras, en la capital argentina mantuvo encuentros, entre otros, con el presidente Mauricio Macri -del que no trascendió lo conversado-, y su homóloga, Susana Malcorra, con quien firmó un memorándum de entendimiento para la creación de un Mecanismo de Coordinación Política Bilateral.
Uno de los asuntos tratados por ambos cancilleres, y que asumieron como un “hecho relevante para América Latina”, según Serra, fue la crisis en la que se encuentra Venezuela.
“Estamos atentos. Tenemos intereses Brasil y Argentina en que pueda haber una mediación”, puntualizó, para señalar que ambos países apoyan tentativas para encontrar un “camino de conciliación” realizadas por figuras como el papa y el expresidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero.
Sin embargo, la relación bilateral y el estado en el que se encuentra el Mercosur, al que Argentina, Brasil y Venezuela pertenecen junto a Paraguay y Uruguay, resultaron los pilares fundamentales del encuentro.
Serra remarcó que desde el punto de vista práctico, junto a Malcorra resolvió crear, tanto en el Senado argentino como en el brasileño, una comisión para acompañar la implementación de medidas que los Gobiernos están negociando para dinamizar el Mercosur y “eliminar problemas de naturaleza legislativa que puedan estar trabando las relaciones”.
En el mismo sentido se posicionó la canciller argentina, quien en un comunicado evocó los principios compartidos que sustentan a la integración regional y reafirmó la voluntad de su país de continuar trabajando en este ámbito para desarrollar una agenda común hacia el interior del bloque.
“Y llevar adelante negociaciones conjuntas con terceros países y grupos de países, todo ello en pos de un mayor bienestar de sus pueblos”, remarcó la ministra, quien sostuvo la necesidad de perfeccionar el Mercosur e incorporarle nuevas disciplinas en línea con procesos de integración más modernos e impulsando avances en los temas relevantes de su agenda.
También dando “mayor dinamismo a su relacionamiento externo, tanto a nivel regional como extrarregional, particularmente en el contexto de la negociación con la Unión Europea (UE) y otros procesos negociadores en curso”, remarcó.
Serra señaló que su país pretende “agilizar” los mecanismos de articulación para facilitar las negociaciones bilaterales de comercio.
En la instancia con la prensa no se obvió el proceso de “impeachment” (juicio político con fines de destitución) que supuso la suspensión de Rousseff por un período de hasta 180 días, tiempo en el que el Senado deberá decidir si aparta definitivamente a la mandataria del cargo y durante el cual Temer y su Gobierno funcionan de forma interina.
El político brasileño definió como “traumático” el proceso contra Rousseff pero defendió que se hace dentro de la “legalidad”.
Es así que consultado por lo que puede afectar este procedimiento a las reformas en el Mercosur y la concreción del acuerdo con la UE, Serra fue tajante.
“No tenemos que esperar nada, estamos gobernando. Hay que ver bien las ofertas (de intercambio de productos) que hicimos, trabajar rápido pero no apresuradamente. Esa es la idea”, subrayó.
Malcorra destacó ante los medios en otra conferencia de prensa anterior a la de su colega, que “no es responsabilidad” de su país “legitimizar o no” la gestión de Temer y remarcó que “hay un proceso interno” en ese país “que se ha seguido a rajatabla”.
“Nosotros hemos estado mirando esto muy de cerca. Estuvimos en contacto con la Administración de la presidenta Rousseff hasta el momento en que se produjo la decisión del’impeachment’ por parte del Senado y no encontramos que (…) haya ninguna razón para decir que el proceso no ha sido legal”, consideró Malcorra.
La ministra hizo énfasis en que Brasil es “el socio” de Argentina y señaló que, una vez Temer ha establecido un nuevo canciller, Argentina tiene que contactar y relacionarse con él.
El memorándum firmado entre los dos países pretende dar seguimiento periódico a proyectos bilaterales estratégicos en materia de ciencia y tecnología, infraestructura o energía y defensa y tiene flexibilidad para funcionar como espacio de coordinación de posiciones en temas de la agenda regional e internacional.
Asimismo, Argentina explicó que se vela por que haya continuidad y seguimiento a la implementación de los temas de fondo de la agenda de política exterior bilateral, “independientemente de la coyuntura política interna de las partes signatarias”.
“El primer país que (Temer) pretende visitar es Argentina”, afirmó Serra, aunque reconoció que la “coyuntura económica y política de su país lo hacen por el momento inviable.