La chilena Paola Muñoz tuvo mayores arrestos físicos para encarar la exigencia de los metros finales, en una jornada definida en el embalaje final, a pura potencia, y llevarse el triunfo en el Gran Premio de Venezuela, prueba correspondiente al Tour femenino de ciclismo organizado por la Federación Venezolana de Ciclismo, puntuable para los Juegos Olímpicos de Río y desarrollada sobre un circuito citadino en la vecina ciudad de San Felipe.
Muñoz prevaleció en un reñido cierre sobre la brasileña Clemilda Fernandes y la venezolana Jenifer César, pedalistas que la acompañaron en el taco de premiación, luego de 73 kilómetros de recorrido.
La carrera se realizó en un trazado pautado en las avenidas Caracas y Libertador de la capital yaracuyana, bajo un envolvente dispositivo de seguridad y con la compañía de un cielo encapotado de principio a fin.
La chilena completó el trayecto con tiempo de una hora, 52 minutos y 11 segundos, un elevado promedio de velocidad de 39 kilómetros por hora.
40 pedalistas de seis países se presentaron a la línea de meta en horas de la mañana, pero solo 13 de ellas completaron el trayecto. María Briceño, única larense en liza y que está prestada a la disciplina de Carabobo, fue una de las corredores que puso pie en tierra, después de sufrir una fuerte caída cuando cubría la tercera circunvalación del evento. Estaba algo golpeada y prefirió retirarse.
Muñoz se sumó a una lista de ganadoras que ya incluía a la brasileña Jenilde Fernandes y a la criolla Danielys García. La amazónica dominó el miércoles la primera prueba de las cuatro que comprende el programa, una ruta entre Cúa (Miranda) y San Casemiro (Aragua), mientras que García hizo lo propio un día luego en el circuito desarrollado en San Juan de Los Morros (Guárico) para entregar valiosos puntos a sus respectivas naciones en el intento de ampliar el número de cupos para la ruta femenina de los venideros olímpicos.
Turno de Barquisimeto
El Tour femenino de ciclismo llega este domingo a Barquisimeto para realizar su cuarta y última parada, antes de que las delegaciones participantes viajen a San Cristóbal en la tarea de hacerle frente al Panamericano de ruta, que inicia el jueves y cierra cuatro días luego.
El banderazo inicial está programado para las diez de la mañana en El Garabatal, al oeste de la ciudad crepuscular, sitio que también acogerá la llegada. Se trata de un circuito que cubrirá varios kilómetros de la avenida Hermano Nectario María (Ribereña), con una topografía diferente a la de las jornadas previas.
En este caso habrá una cuota de montaña en cada vuelta y a pocos kilómetros de la llegada, que marcará diferencias a la hora de la definición.