La NASA está tratando de resucitar a la sonda Kepler, dedicada a la exploración de los planetas pero que se ha declarado en emergencia a una distancia de 120 millones de kilómetros (75 millones de millas).
La sonda, que ha detectado casi 5.000 planetas fuera de nuestro Sistema Solar, se declaró en emergencia en algún momento la semana pasada. La última vez que entró en contacto con la base fue el 4 de abril. Los ingenieros descubrieron el problema justo cuando iban a mandar a Kepler hacia el centro de la Vía Láctea.
Es la más reciente crisis en la vida de Kepler. La sonda fue lanzada en el 2009 y concluyó su misión principal en el 2012. A pesar de constantes averíos, Kepler continúo en una misión prolongada apodada K2, hasta ahora. La inmensa distancia entre la sonda y nuestro planeta hace muy difícil repararla.