El gobierno lanzó este domingo un plan de distribución de alimentos puerta a puerta a través de una «tarjeta de abastecimiento» que se entregará a los beneficiarios de programas sociales, como parte de una estrategia para mitigar la severa crisis de escasez.
«Con este arranque de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), empieza el sistema popular de distribución de alimentos casa por casa», dijo el presidente Nicolás Maduro en una alocución transmitida por la televisora gubernamental desde el estado Vargas.
El gobierno asignará bolsas de comida a los beneficiarios de sus programas sociales por medio de una «tarjeta de abastecimiento seguro (…) para que todo el mundo esté censado y asegurado», detalló el mandatario.
Añadió que la tarjeta busca garantizar la entrega de un «subsidio directo al hogar que lo necesita» y evitar la reventa de productos subvencionados por el Estado con sobreprecio, una práctica que se conoce en Venezuela como «bachaqueo».
Esta iniciativa se suma a una serie de medidas tomadas por el presidente venezolano para combatir el desabastecimiento de más de dos tercios de productos básicos.
A finales de febrero, Maduro anunció la creación de una empresa productora de alimentos administrada por los militares y puso en marcha un programa de agricultura urbana.
El gobierno atribuye el desabastecimiento a una «guerra económica» desplegada por empresarios para desestabilizarlo.
Por otra parte, Maduro reconoció que el programa de emergencia para distribuir medicamentos que habilitó en febrero pasado para combatir el desabastecimiento fue «infiltrado por la corrupción».
«¿Ustedes saben qué descubrimos? Que se nos creó una mafia interna en 800-Salud que estaba falsificando récipes y estaba robando las medicinas para bachaquearlas en la calle», declaró.
