Este miércoles la Asociación Civil Madres y Padres por los niños en Venezuela, acudieron al Tribunal Contencioso Administrativo para consignar un recurso de amparo contra las ventas de insumos infantiles reguladas por terminal de cédula y sistema biométrico (captahuellas).
En el escrito exigen que se elimine el sistema, puesto que los padres se ven impedidos para comprar leche de fórmula, pañales y otros insumos indispensables.
“En Venezuela se comercializaban 27 tipos de fórmulas para niños, ahora sólo se encuentra uno y si nos ponen trabas para comprarla, la vida de nuestros hijos está en juego” indicó la abogada Gretna El Halabi, líder de la asociación sin fines de lucro.
Explicó que llevan un camino largo para garantizar el derecho de los niños, se han reunido con gerentes y representantes de establecimientos quienes se muestran solidarios con la causa sin embargo aseguran no poder cambiar el sistema por ser reglamentos establecidos por el Gobierno nacional.
Asimismo informaron a la Superintendencia de Precios Justos (Sundde) pero no han obtenido respuestas concretas.
El grupo de Madres y Padres por los niños sostuvo un encuentro con los diputados a la Asamblea Nacional, Edgar Zambrano y William Gil, integrantes de la comisión permanente de Seguridad y Defensa y comisión permanente de La Familia, respectivamente. Lograron obtener un derecho de palabra y esperan que este padecimiento que sufren todos los venezolanos, sea solucionado prontamente.
Marianela Bastidas, integrante de la asociación, dice que ha vivido mil y un adversidades para adquirir la leche de fórmula para su hija. Se siente impotente cuando luego de recorrer varios comercios la consigue pero el empleado se niega a vendérsela porque “hoy no le toca”.
Proponen que los establecimientos opten por pedir sólo partida de nacimiento, para garantizar que los bachaqueros no se aprovechen de la facilidad para adquirirla.
El abogado Manuel Virguez, del Movimiento Vinotinto, acompañó al grupo a la consigna del documento en el Edificio Nacional, la petición es que sea eliminado todo tipo de regulación que limite la capacidad de compra de insumos para niños.
Sugiere que el Gobierno nacional aumente la asignación de divisas a las casas comercializadoras de este tipo de insumos y priorice lo relacionado a las medicinas y sector salud.