En opinión del ex diputado Pedro Pablo Alcántara, Hugo Chávez en su empeño por convertirse en el amo del poder llegó a Miraflores con su propuesta electoral de hacer una nueva Constitución mediante una Constituyente.
Fue así como generó una Constitución de fachada, aseguró. Porque ese texto constitucional, para los efectos prácticos de la república, 16 años después de su promulgación, es una Constitución fachada, que no se cumple y el mejor ejemplo lo tenemos cuando el propio Nicolás Maduro ordena a la militancia del Partido Socialista Unido de Venezuela a irrumpir en la Asamblea Nacional, para sabotearla, a que no se acaten las decisiones de los diputados y que el Tribunal Supremo de Justicia esté a su disposición.
Aquí lo que está vigente es el fallido intento de reforma de la carta magna, que fue aprobada también arbitrariamente con el nombre de Plan de la patria.
Éste desestima los valores de naturaleza democrática de la Constitución del ‘99 y genera una nueva sociedad para ser controlada por el gobierno.
Electoralmente, el gobierno fue primero tomado por Chávez, quien luego tomó el Estado; es decir, las instituciones fundamentales: Tribunal Supremo de Justicia, Pdvsa, el Banco Central de Venezuela y, descaradamente, el control de la descentralización, la cual fue liquidando para volver a la figura que los supuestos revolucionarios habían planificado, pero que iban a desarrollar por etapas, que era la inplantación de un Estado comunal socialista.
Conviene recordar que se hicieron advertencias oportunas hacia dónde iba ese Estado socialista, cuánto le iba a costar a la república y cuáles iban a ser las consecuencias.
El primer conflicto fue con el sector educativo, luego de lo cual siguió con la creación del sistema hegemónico comunicacional pagado por el Estado, que incluye televisoras, medios impresos ,radios recuperadas utilizando como excusa el vencimiento de las concesiones, la promulgación de la ley Resorte que permite a Conatel tomar decisiones sin ningún tipo de control para desmontar el sistema de comunicación privado, la organización de un aparato cultural y otras medidas.
La segunda fase del proyecto fue la instalación de un régimen totalitario, autoritario y militarista. Se aseguró tener un sistema judicial para que, a través de una expresión cínica, en Venezuela no hay presos políticos sino políticos presos. Es por eso que tenemos una situación extremadamente crítica.