La iglesia católica está preparándose desde el inicio de la Cuaresma, el miércoles de ceniza, para la Semana Santa, que comienza el 20, Domingo de Ramos, cuando se celebra la entrada de Jesús a Jerusalén.
Los diferentes templos de Barquisimeto, como los de todo el país, tienen listas las programaciones a llevar a cabo durante esos días de espiritualidad.
Uno de ellos, el de San José, presenta un nuevo rostro luego de que la alcaldía de Iribarren se encargara de pintarlo completamente, algo que agradece el cura párroco, José Pascual.
El sacerdote, de los Misioneros Redentoristas, considera que la Semana Santa es “un tiempo intenso de oración, penitencia, ayuno, de escuchar la palabra de Dios”.
Explica que cada parroquia adecúa sus actividades, siguiendo siempre las directrices de la iglesia y teniendo como eje central la pasión, muerte y resurrección de Nuestro Señor Jesucristo.
El padre Pascual es conciente de que en sus predicaciones, el sacerdote no puede obviar el tema de la crisis que afecta a Venezuela.
“En Venezuela estamos viviendo un viacrucis real, pero Cristo acompaña a su pueblo, sigue cargando con su cruz”, afirma.
Dice que, como sacerdote, escucha a las personas que acuden a él y lo que oye son historias desgarradoras, de salud, alimentos, seguridad, pero debe darles palabras de aliento, de esperanza.
“Los cristianos no somos ajenos a lo que pasa fuera de la iglesia, en el mundo; cada sector de la población vive su propio drama”, expresa con muestras de preocupación.
Al agradecer a la alcaldía por las mejoras al templo no deja de preocuparse por lo que se debe hacer para que las personas puedan acercarse con mayor tranquilidad.
Dice que la plaza sigue convertida en un baño público por parte de personas que pernoctan en las noches a la espera de poder adquirir alimentos o artículos de la cesta básica en el comercio cercano.
Considera necesaria la colocación de un puesto de la policía o de la Guardia Nacional para disponer de mayor seguridad.
Con respecto al programa de la Semana Santa, recuerda que este domingo es la bendición de los ramos, mientras que las eucaristías serán en los horarios normales.
El Jueves Santo, a las 7 de la mañana, misa, a las 9 la misa crismal y a las 5, escenificación de la Cena del Señor, y en la noche, sagrado triduo pascual.
El Viernes Santo, hora santa, entre 8 y 12 del mediodía y a las 4, conmemoración de la pasión y muerte de Jesucristo, las Siete Palabras y la procesión con el Santo Sepulcro.
El sábado, a las 6, vigilia de Pascua, con la bendición del fuego, pregón pascual, liturgia bautismal, liturgia de la palabra y liturgia eucarística.
Fiesta de San José
Este sábado, la iglesia católica celebra la festividad en honor a San José, el esposo de María, considerado como modelo y guía de las familias cristianas.
En Barquisimeto, la iglesia donde se venera su gloria está ubicada en pleno centro de la ciudad, un verdadero oasis espiritual para sus habitantes.
Para José Pascual, cura párroco, San José es un tesoro oculto de la espiritualidad.
“Es un santo que tiene mucho que enseñarnos, un pozo de sabiduría”, señala.
Igualmente explica que su nombre significa, El que va en aumento.
En esta oportunidad la parroquia ha elaborado un pequeño programa que se inicia a las 7 de la mañana con la eucaristía.
A las siete, la celebración extraordinaria con la consagración de nuevos miembros de la hermandad.
A las cuatro, Santo Rosario y a las cinco, la misa solemne a la que se espera asista toda la feligresía josefina, no sólo de la parroquia sino también de otras.
La procesión con la imagen de San José por algunas calles cercanas al templo está prevista para las 6 de la tarde.
