La venta de los alimentos será a través de las comunidades organizadas bajo la figura de comunas o consejos comunales, entes que se encargarán de producir sus propios alimentos, tal y como lo señaló el presidente Nicolás Maduro: las comunas distribuirán distintos rubros alimenticios.
Todo esto a partir de la reestructuración de la Misión Alimentación y de toda la red de Abastos Bicentenario, que será convertida en centros de distribución en las comunidades y de la reestructuración de Mercal y Pdval.
Maduro también anunció la reestructuración del sistema de bodegueros para crear un nuevo sistema de mercados comunales a cielo abierto.
La Comuna Ataroa es responsable de todo el ámbito de La Carucieña y áreas adyacentes.
Agrupa 43 consejos comunales. Una comuna es producto de la integración de los consejos comunales. La Comuna evolucionará al Estado Comunal; si no hay consejos comunales no hay comunas y si no hay comunas no hay Estado Comunal, explicó el señor Faustino Mendoza, luchador social y encargado de la bloquera en el sector. La Comuna Ataroa se fundó hace siete años.
Nos sentimos atendidos y engañados por el Gobierno
-¿El vicepresidente Aristóbulo Istúriz le hizo un llamado a las comunas a fin de que produzcan sus alimentos, qué opina al respecto?
-Ese llamado no es nuevo, ya el presidente Chávez lo había hecho. Aquí había lo que antes denominaron los huertos familiares, producíamos lechuga, cilantro, pimentón, etc. Maduro e Istúriz están retomando una orden que había dado Chávez.
-¿Qué pasó con esos huertos?
-Esos huertos familiares fueron descuidados y abandonados por falta de apoyo del Estado. Nos daban las semillas y los insumos para regar pero no hubo vigilancia, seguimiento y control. No hubo nunca una supervisión. Eso pasó en todas partes. Cada quien hizo lo que quiso.
-Si eso ya lo había hecho Chávez, ¿qué opina de este nuevo llamado?
-Referente a la coyuntura que estamos viviendo en lo político, económico, social y cultural, es posible que ahora sí el pueblo organizado tome la batuta del desarrollo económico del país. Cuando me refiero al pueblo organizado hablo del ingeniero, abogado, agrónomo, todos los profesionales y no profesionales. Tenemos que integrarnos, tanto gobierno como oposición porque lo importante es Venezuela.
-¿Cree que las comunidades organizadas estén en la capacidad de producir sus propios alimentos y coordinar la distribución de diversos rubros?
-Sí están en la capacidad, siempre y cuando el poder constituido y las comunidades organizadas apliquen los principios de supervisión, vigilancia y control, además de responsabilidad y compromiso. Vender alimentos no es nada del otro mundo pero se requiere una buena preparación, una serie de valores y principios. Los prejuicios siempre van a existir y más dentro de una comunidad. La mejor forma de evitarlos es rendir cuentas.
-¿A partir de esa responsabilidad que les confiere el Presidente Maduro pudieran los consejos comunales o comunas incurrir en hechos de corrupción?
-Es muy posible, sin embargo, no es el común denominador. Es posible que alguien beneficie a un familiar, a un amigo, pero no es el común. Tengo que recordar que en el programa de José Vicente del domingo pasado, el ex embajador de Venezuela ante la OEA, Roy Chaderton, manifestó que la corrupción está galopando dentro del proceso y claramente dijo: por sus Hummers los conoceréis… algo quiso decir…
-Claro, incluso Maduro señaló que Abastos Bicentenario se pudrió…
-Lo que me preocupa es que el Gobierno está atacando a los de abajo. Les está llamando (a los funcionarios aprehendidos de Abastos Bicentenario) gorgojos. Un gorgojo es un parasito muy pequeño. Los gorgojos son funcionarios pequeños. ¿Por qué no atacan a los de arriba? Esa operación debería ser para todos por igual. Esa corrección debería ser en todos los niveles, para los de arriba, los de abajo y los del medio. Si había irregularidades en esa red se estaban haciendo la vista gorda.
-Como comuna, ¿han ganado o perdido?
-Sí hemos ganado. Hemos ganado terreno, sí se tiene aceptación. Tenemos debilidades pero también fortalezas. No todo es malo. Hay cosas malas pero también buenas.
Considero que dentro de las debilidades hemos perdido credibilidad porque hemos trabajado para el poder constituido, es decir, hemos trabajado para el gobierno y nos hemos olvidado del poder constituyente que es el pueblo. Aquí viene Reyes Reyes o Falcón y la gente le tiende la alfombra roja a cualquiera. Eso no puede ser. Tenemos que aprender a tratarnos como iguales, sin irrespetarnos. El artículo 5 reza que la soberanía reside en el pueblo. Creo que tenemos que ser más independientes del poder constituido.
-¿Resuelven los problemas de las comunidades? ¿Cómo evitan la corrupción?
-Tratamos de hacerlo. El problema de la corrupción es cultural. Aquí se sigue manejando el slogan “ponme donde hay”. Tenemos que suprimir esa debilidad a través del fortalecimiento de los valores y sancionar. Cero impunidades. Como no hay sanción la gente hace lo que le da la gana. Incluso, para que veas que sí se procura la integridad. La bloquera socialista Pedro Durán fue intervenida por la propia comuna. Esa es la autoridad que tiene un ente de ese tipo. La bloquera fue intervenida por manejo indebido por parte de algunos compañeros que estaban al frente de ella. Ahora, todo está en orden. Nosotros fuimos ante la Fiscalía para denunciar la corrupción que hubo allí.
-¿Las comunas benefician solamente a los que están con el proceso revolucionario?
-No. A todos por igual. Sin discriminación de ningún tipo. Incluso, hay consejos comunales que son de oposición. Pero aquí en Lara la oposición somos nosotros porque no tenemos alcaldía ni gobernación.
-¿Se sienten atendidos por el Gobierno nacional?
-Atendidos por el gobierno y engañados por el gobierno. Nos sentimos atendidos y desatendidos. Mucho político del proceso se mantiene engañando al pueblo honrado. Continúan engañando al pueblo. Eso causa que pierdan credibilidad, seriedad y sobre todo pérdida de votos.
Una parte contenta y la otra molesta
Por su parte, la señora Yazmín Prado, vocera de Alimentación en la Comuna Ataroa, comentó igualmente que el llamado a producir no es nuevo.
“Se dieron cuenta que la mejor opción es que nosotros mismos sembremos y cultivemos. Por medio de esta comuna estamos haciendo convenios con otras que tienen tierras para cultivar y traer el alimento a nuestras comunidades”.
Indicó que igualmente tienen inherencia en las ocho bodegas (PD Mercales) de la comunidad. Tres consejos comunales se encargan de coordinar las ventas de los alimentos.
“Lo único que pedimos a CVAL y Mercal es que nos surtan según el censo realizado en cada comunidad. Que no trabajemos con base en 120 bolsas, programa con el cual nos iniciamos. Los censos arrojan hasta 700 familias por comunidad. No nos estamos dando abasto y esto hace que una parte de la comunidad esté contenta y la otra molesta.
Además, es poco lo que estamos recibiendo. Tienen que aumentarnos la cantidad de comida y la cantidad de bolsas, así ayudaríamos muchos al pueblo”.
Se conoció que la bolsa de comida contiene harina, azúcar, leche, pasta, sal, etc. Una bolsa por familia.
Ojo a los bachaqueros
Según Prado en la Comuna Ataroa buscan por todos los medios controlar a aquellas personas que revenden ciertos rubros en Bs. 1.000 y Bs. 1.200.
“La empresa socialista Leguminosas del Alba nos está beneficiando con caraotas a Bs. 100/Kg. La cual estamos llevando casa por casa”.
-¿Sí se está llevando a cabo el programa casa por casa?
-Sí, la comuna Ataroa lo hace. El casa por casa con respecto a la caraota. Con productos Mercal no se ha podido. Llevamos las caraotas hastas las casas y trabajaremos con hortalizas, verduras y frutas próximamente. Introduciremos el proyecto esta semana con las necesidades en verduras, legumbres, frutas y hortalizas.
-¿Cómo sería la coordinación de las bodegas por parte de la comuna?
-Hemos conversado con Nancy Gómez de la Corporación Venezolana de Alimentos (CVAL). Nosotros, organizados como consejos comunales, articulamos la venta de la comida. Pero no nos damos abasto. Nosotros queremos que la comida le llegue a todo el mundo.
-¿Si tienen la capacidad para coordinar la venta de alimentos?
-Sí porque lo hemos hecho por largo tiempo. Somos los que estamos coordinamos la venta de alimentos, la comida PD Mercal.
-¿Ustedes están al tanto de quienes revenden?
-Claro y se retiran de los censos por medio de las asambleas para evitar que compren a precio regulado y vendan a otro costo.
-¿Es posible que algún encargado de estas ventas beneficie a los suyos y caiga en la discriminación?
-No, aquí coordinamos de la mejor manera para que sólo compren los compañeros del ámbito del consejo comunal. Nadie de otro ámbito puede venir a comprar. Se benefician todos, no se tilda a nadie. Nosotros no hacemos eso. Yo coordino 45 consejos comunales e implemento una rotación para que no se creen vicios porque puede ocurrir que algún vocero se alíe con la bodeguera. En las asambleas le pedimos a la gente que denuncie a aquellas personas que les están llevando bolsas a los voceros o que les venden a otros consejos comunales fuera del ámbito.
-Actualmente, ¿se sienten atendidos por el Gobierno o hay debilidades?
-Hay debilidades. Ese golpe con la disminución en la cantidad de comida es muy fuerte porque en las comunidades más pequeñas tenemos 300 familias. ¿Cómo beneficio sólo a 120? Eso deben revisarlo porque debe trabajarse de acuerdo al censo.
-¿Qué hacen los inspectores populares?
-Ellos tienen su origen en las UBCH. Representan al Gobierno de calle y son los que deberían estar pendientes de las ventas de alimentos. Como vocera de alimentación coordino que toda la gente compre en orden y que la bodeguera saque el producto al costo. Cuando se habla de ventas Pdval puede comprar quien quiera. Cuando se habla de ventas Mercal es sólo para la comunidad.
Abastos Bicentenario: venta de alimentos se mantiene por terminal de cédula
La nueva gerencia de Gran Abasto Bicentenario, situado en la avenida Libertador, reiteró a EL IMPULSO que no abrirán los domingos. La medida dispuesta hasta nuevo aviso se inició el pasado 21 de febrero. La decisión tiene carácter nacional y fue tomada por la alta gerencia.
Acerca de la reestructuración de toda la red de Abastos Bicentenario el gerente, quien prefirió reservar su identidad hasta no poseer información oficial, dijo que comenzaron las reuniones en la capital para conocer de qué manera el establecimiento se convertirá en centros de distribución de alimentos en las comunidades.
“Tenemos que esperar las directrices. Actualmente trabajamos de manera normal. La venta de alimentos se mantiene por el terminal de la cédula”, dijo el encargado, quien se presentó como abogado proveniente de Caracas y con una semana en el cargo.
“Seguimos expendiendo los productos regulados de manera normal. La gente hace su cola desde las 5:00 a.m. y nosotros abrimos a las 7:00 a.m. Todos los días llegan alimentos. Unas 8.000 personas de Lara y otras regiones aledañas se abastecen diariamente”.
Aseguró que en el abasto no hay restricciones de ningún tipo. “Todo lo que llega se vende. Es falso que los militares compren primero, lo hacen al final de la jornada”.
Sabemos quienes necesitan y quienes son bachaqueros
Lays Gómez es integrante del Consejo Popular de Abastecimiento y Producción (CPAP). El ente que nació en mayo de 2015 para observar el desempeño de Abasto Bicentenario. Igualmente, el CPAP supervisa lo que llega y sale del sitio, prestan atención al usuario y denuncian cualquier irregularidad al Ministerio de Alimentación.
“Hemos hecho mucho hincapié porque aún se presenta el desabastecimiento de los productos básicos. Permanentemente nos reunimos con la gerencia porque siempre se suscitan algunos problemas”.
Gómez precisó que no hay acaparamiento en el establecimiento.
“Eso no es cierto, por eso nos tomó por sorpresa la detención de algunos funcionarios de Bicentenario. Creemos que fue por una mercancía que había llegado días atrás que faltaba por chequear y subir a piso, pero no era acaparamiento. Creemos que fue una acción injusta pero las investigaciones darán sus resultados”.
Sobre la coordinación de las ventas por parte de las comunidades organizadas destacó que aún desconocen cómo será el proceso y la reestructuración.
“Sería positivo porque en las comunidades sabemos quiénes necesitan los alimentos y quiénes son bachaqueros para dar un alto. Sabemos que tampoco es cualquier cosa, implica una enorme responsabilidad. Podríamos evitar la corrupción de alimentos”.
Mencionó que los integrantes del CPAP se prepararon en Higiene y Seguridad Industrial, para tener acceso a las cavas-cuarto y a los depósitos. Asimismo, chequean las facturas y tienen un informe de la mercancía que entra y sale, así como de los usuarios que compran diariamente.
“La gente hace cola desde las 3:00 a.m. cuando saben que hay variedad de productos regulados. Sin embargo, eso pasa poco, por lo general se consiguen dos o tres productos regulados. La semana pasada sólo hubo variedad martes y sábado”, dijo.
La usuaria comentó que las personas se dedican a hablar sin saber, acusando que los empleados se llevan la comida.
“A los empleados les corresponden sus productos de forma mensual. Evidentemente, hay que asegurarles sus alimentos”.
Algunas veces no se pueden sacar los productos a piso porque no se han chequeado, pero todo sale, aclaró.
El CPAP lo integran personas de las comunidades Simón Rodríguez, La Antena, Comuna Pío Tamayo, Las Casitas y calle 51.
Además de Gómez se encuentran Zaida Soto, María Roo, Aidaris Gómez, María Rojas, Oswaldo Silva y Lizmary Briceño.