Como un espacio para el libre intercambio de visiones y opiniones sobre la vida de Bolívar, la Universidad Nacional Experimental del Yaracuy (UNEY) continuó con su ciclo de conversatorios, presentando dentro del marco de su 17° aniversario: “Bolívar en el imaginario local”, junto a tres importantes conocedores del tema, quienes compartieron con estudiantes, docentes y la comunidad en general el significado de su lucha patriótica y sus vivencias.
El módulo de Guama de la institución sirvió para llevar a cabo este encuentro que contó con la presencia del docente, investigador y cronista de la UNEY, Antonio Rivero, el profesor y director de la Unidad Educativa San Ramón de Bruzual, Erasmo Cordero y la docente y vocera del consejo presidencial popular de la cultura por Yaracuy, Flor Tinjacá García, quienes abordaron desde su perspectiva la figura del Libertador como eje de la memoria colectiva.
Simultáneamente, la fundación Una Mirada al Arte presentó una exposición de dibujos e ilustraciones sobre el Libertador y a la vez realizaró un mural portable en carboncillo del rostro más reciente en 3D del padre de la patria por parte de un grupo de sus miembros.
Bolívar educador
La visión y el abordaje de Rivero sobre Simón Bolívar estuvo orientado hacia lo educativo. Afirmó que más que un personaje histórico, a Bolívar hay que asumirlo como un referente trascendental en la historia del país, al haber contribuido con los valores, los idearios y la formación integral. Se refirió a la enseñanza del ajedrez en el proceso de formación como parte de lo que fue su trabajo de grado, que el Libertador también propuso en su proyecto educativo de 1825.
“Bolívar planteó dentro de sus ideas la formación en la educación física, la matemática; además del cultivo, la pronunciación y el buen uso de la palabra; el arte poético, la recreación, el baile y la danza, adecuado todo a la edad, a las inclinaciones y a los temperamentos, así como la ejercitación de la memoria y el entendimiento”, dijo Rivero.
Hombre integral
Para Cordero hablar sobre Bolívar siempre será interesante y deberá ser abordado con pasión porque su vida como hombre integral así lo inspira. Afirmó que se convirtió en un ejemplo de su época y la actual luego de 200 años después, porque amaba la libertad y por ese amor se preparó en las diversas áreas del pensamiento, y sin ser educador tuvo ideas pedagógicas aún vigentes.
“El Libertador fue un hombre ejemplar, no porque se lo propusiera, sino porque amaba lo que hacía. Y hoy en días esas ideas están tan vigentes que una muestra es que en este proceso de cambio se van a implementar en las instituciones de educación media el pensamiento bolivariano como acción pedagógica”, dijo Cordero. Aseguró que su integralidad como hombre fue demostrada al destacarse genialmente como poeta, a través de sus cartas; como estadista, al plantear y diseñar una concepción de Estado diferente, incorporando en el discurso de Angostura la constitución del poder moral, presente hoy en día en nuestra organización política.
Lo humano del Libertador
Para entender el valor humano del libertador, la pedagoga Flor Tinjacá basó su intervención en un resumen sobre las distintas facetas que Bolívar desarrolló. Para ello, relató parte de su trayectoria como estadista, guerrero, político, amante, escritor, filósofo, entre otros.
“Bolívar amó lo que hacía y amó a su patria, y como amante derivó en aquel Bolívar epistolar y apasionado, que escribe cartas y poemas. Y además de todo eso fue un hombre capaz de proyectarse hacia el futuro”, indicó.