El presidente Juan Manuel Santos expresó el sábado su aspiración que en cuestión de meses se pueda alcanzar un acuerdo de paz definitivo con la guerrilla de las FARC, con la que se iniciarán negociaciones en octubre.
Santos dijo también que el proceso de diálogos debe llevarse adelante con discreción, honestidad, seriedad y de forma realista, es decir «no pedir cosas que son inaceptables, de parte y parte» o de ambos bandos. Habló durante en un acto en Sincelejo, en el departamento Sucre y a unos 535 kilómetros al noreste de Bogotá.
«Yo creo que si mantenemos esos principios (seriedad, realismo), lo hacemos en forma discreta y con buena voluntad ojalá podamos decir en unos meses que por fin llegó la paz a Colombia», indicó el mandatario en alusión a que procesos anteriores de paz fallidos se extendieron por al menos tres años.
Soy un convencido, agregó el mandatario en el acto transmitido en vivo por la televisora oficial, que «después de 50 años de guerra, nosotros tenemos que pasar esa página… somos el único país con un conflicto interno en todo el hemisferio».
Ratificó que no habrá un cese de fuego, sino sólo hasta que se acuerde terminar el conflicto. «Le he dicho a estos individuos de las FARC que solamente el día en que cerremos el conflicto definitivamente, nosotros cesaremos las operaciones militares», indicó Santos.
No dio detalles sobre qué tipo de propuestas, de lado y lado, eran «inaceptables» o con qué voceros de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) ha hablado directamente o si refería a las posturas gubernamentales, pero expresadas a través de los delegados del gobierno.
Hasta ahora sólo se ha informado oficialmente de contactos entre funcionarios de alto rango, pero no el propio presidente, y representantes de las FARC a lo largo de más de año y medio, de los cuales los últimos seis meses fueron en conversaciones reservadas en La Habana para firmar un acuerdo marco de inicio de negociaciones en Oslo, Noruega, en octubre.
Voceros de la guerrilla han dicho que será el 8 de octubre cuando arranquen las conversaciones en la capital noruega.
Santos dijo que el país estaba representado y «en buenas manos» a través de sus cinco negociadores oficiales, cuyos nombres fueron revelados el 5 de septiembre. Un día después desde La Habana, miembros de la guerrilla informaron sobre al menos dos de sus negociadores.
Entre los delegados oficiales hay dos generales en retiro: El general Oscar Naranjo, quien pasó a retiro en junio pasado como director de la Policía Nacional y el general Jorge Enrique Mora, quien fue comandante del Ejército a fines de los años 90 y a inicios de los años 2000 comandante de las fuerzas militares.
«La gente me pregunta pero bueno usted porqué puso militares (entre los negociadores), eso no complica las negociaciones? . Y yo les digo no, todo lo contrario. La paz se hace entre los que están peleando, entre enemigos, no entre amigos», destacó Santos.
Las FARC, con unos 9.000 integrantes, surgieron en 1964 y desde entonces están alzadas en armas, afirman que buscan un país con democracia y justicia social. Niegan que tengan relación con el narcotráfico y que tengan actualmente secuestrados en su poder.