Desde el 22 de diciembre y hasta el día de la salida de la Virgen, los uniformados de la Policía Municipal de Iribarren están en permanente vigilancia en el pueblo de Santa Rosa.
Hasta la fecha no se han registrado hurtos, robos ni ninguna situación irregular.
Los 35 uniformados presentes están encargados del tránsito vehicular, seguridad ciudadana y el control de los comerciantes informales.
Héctor Medina, director del cuerpo policial, señaló que conforme se acerque la fecha de la procesión, incrementarán el número de uniformados.
Para el 14 de enero, estarán de servicio 255 funcionarios, casi la totalidad de los efectivos que conforman la institución.
Los puntos de control fijos estarán situados en el pueblo, en el Tiuna, avenida Lara con Leones y avenida Venezuela con Morán.
Allí se atenderán denuncias y se realizarán requisas de ser necesario. Medina acotó que dispondrán de la unidad ambulancia para atender emergencias médicas.