Un sinfín de corazones inquietos buscan respuestas seguras a las preguntas de la vida sin encontrarlas, dijo el papa Francisco el miércoles.
Francisco se hizo eco de esta reflexión durante una misa en la basílica de San Pedro para celebrar la Epifanía, que recuerda el relato evangélico de los tres Reyes Magos, que siguieron una estrella para visitar al Niño Jesús en Belén.
El pontífice dijo que la iglesia tiene la tarea de «mostrar cada vez de forma más clara el deseo de un dios que esté presente en el corazón de cada hombre y mujer», pero «ser un misionario no significa hacer proselitismo».
«Al igual que los Reyes Magos, incontables personas en nuestros días tienen ‘corazones inquietos’, que siguen buscando sin encontrar respuestas seguras», dijo Francisco.
Refiriéndose al largo viaje de los Reyes Magos, Francisco dijo: «Ante Jesús, todas las divisiones de raza, lengua y cultura desaparecen».