Para la visita 160 de la Divina Pastora a Barquisimeto, se observarán varios cambios en las actividades previstas por la Iglesia, comenzando con la bajada con miras a garantizar la seguridad de la imagen, hasta la ruta que recorrerá en su periplo espiritual por las diferentes parroquias del municipio los primeros meses del año.
El párroco de Santa Rosa, padre Rafael Chávez, informó que por este año, y después de varias reuniones, se decidió que la última iglesia que visitará antes de regresar a su morada en el pueblo, no será Nuestra Señora de la Consolación en la urbanización Santa Elena, sino la iglesia Claret ubicada al final de la carrera 19, para iniciar la avenida Lara.
Allí estará dos días y el sábado previo al Domingo de Ramos retornará. Explicó que la iniciativa es debido a la importancia que representa esta iglesia en la historia de la Divina Pastora. “Es icónica por ser allí donde se hacía la primera parada al llegar a Barquisimeto y quisimos que ahora sea la última. Además la ubicación es muy estratégica”.
Según la historia, el párroco de la iglesia Claret, el presbítero Macario Yépez, en el año 1855, cuando se desató una epidemia de cólera que cobraba la vida de los pobladores y no había medicina que la controlara, le imploró a la Divina Pastora que acabara con este sufrimiento y le pidió convertirse en la última persona en morir de la enfermedad en la ciudad. La promesa se cumplió. El padre Macario Yépez murió de cólera días más tarde; la epidemia desapareció de la ciudad y fue señalado como un milagro de la Divina Pastora.
La idea es que el día de regreso a Santa Rosa también se haga un procesión por toda la avenida Lara. Los organizadores estuvieron en reuniones con la Alcaldía de Iribarren para la logística y todas las medidas que implica como el cierre de la vía. El padre Chávez espera que los feligreses también la acompañen en su retorno.
Recordó que en el 2015 fue muy emotivo ver cómo la Virgen llegaba a su templo junto a sus devotos.
Hoy la bajan
Como ya es tradición desde hace tres años, los 6 de enero la iglesia celebra la bajada de la imagen de la Divina Pastora de su nicho hasta el altar, donde estará hasta su salida el 14 de enero, cuando los devotos podrán observarla y orar cerca de la Virgen.
“Me asombra cómo el pueblo ha acogido con tanta alegría, emoción y entusiasmo al ver como la bajan (la imagen) de su nicho. Se ha hecho de la manera más respetuosa posible, cuidando su integridad”, manifiesta el padre Chávez.
Para garantizar la seguridad de la Virgen en el momento de la bajada desde el nicho, pasando por el estrecho marco hasta llegar al trono, decidieron este año después de celebrarse la misa de la 6:00 de la tarde, despejar el área del altar colocando unas cortinas para que los 12 celadores encargados de bajarla lo puedan hacer con más tranquilidad, para evitar que el trono y la imagen sufran un movimiento brusco. Después de ese acto las personas sí podrán acercarse.
Con esta nueva tradición de celebrar la bajada también la Virgen luce un nuevo vestido que es donado por devotos y lo usará hasta el 12 de enero en la noche cuando sea cambiada por el traje que lucirá para la procesión.
“Este fue un traje (el de hoy) que hizo una costurera de aquí de la parroquia que deja ver el talento que existe para confeccionar vestidos tan hermosos como todos los que ha usado la Divina Pastora. Son muy bien elaborados”.
Informó que los medios de comunicación tendrán acceso para tomar la foto a la Virgen la madrugada del 13 de enero, para ser publicada en la edición del 14. El párroco señaló que la Iglesia tendrá pequeñas sorpresas alusivas al siglo 18, época en la cual fue creada la imagen. “La intención es recordar ese realismo religioso y que sea captado por los medios en esta oportunidad”.
Restaurada
La imagen de la Virgen, sometida al tiempo y a elementos como el aire y el sol, además del propio movimiento, debió ser restaurada.
El padre Chávez aclaró que sólo se trató de pequeños retoques, especialmente en el área de las manos.
A la réplica también la sometieron a reparaciones por haber sufrido una lesión en la mano. El padre comentó que fue impresionante cómo se partió la madera.
Los restauradores han señalado a la Iglesia que los constantes movimientos es lo que más afecta a la imagen y lo recomendable siempre ha sido que sea cargada el mayor del tiempo en los hombros de las personas porque recibe menos impacto, pero el sacerdote aclara que se hace difícil, particularmente en las visitas a las parroquias que no acuden tantos devotos y debe ser trasladada en el pastora móvil en los recorridos largos.
Rescate del pueblo religioso
“Hablo no sólo como sacerdote, sino como devoto y creyente de la Virgen y me genera preocupación la calidad de vida que ahora tiene el pueblo de Santa Rosa; existe mucha pobreza, es fácil que se oculten los bandidos, malhechores y ladrones. Además ya no está la Guardia Nacional por razones variadas. Siento que la presencia del licor, drogas y vicios están deteriorando la calidad de Santa Rosa como un pueblo religioso y se está convirtiendo más en un pueblo turístico”, manifestó el padre Chávez sobre los aspectos que cree se deben mejorar.
Está claro que el pueblo es turístico por el significado de la imagen de Pastora en todo el país, pero afirma que quienes desean visitar a la Madre de Dios en su advocación de Divina Pastora, también esperan encontrarse con un poblado seguro, en el cual se pueda disfrutar de la estadía. En los últimos años la localidad ha ido perdiendo su origen religioso, especialmente los fines de semana cuando abundan las festividades nocturnas.
Otra de las preocupaciones que tiene el sacerdote son las constantes fallas que presenta la infraestructura de la casa de Dios, por la humedad que existen en la zona. Es común que las paredes presenten filtraciones lo que representan constantes gastos. El año pasado le hicieron reparaciones en el techo y contó con el apoyo de la Alcaldía y Gobernación, pero cada año son problemas diferentes por los años que tiene de construida.
Números corpóreos
El Instituto Municipal de la Vivienda (IMVI) comenzó la colocación de los números corpóreos desde Santa Rosa a lo largo de la ruta para indicar el recorrido y aportar un atractivo adicional a la vitrina urbana Paseo de la Devoción.
En total serán cuatro números que indicarán: 0 km que está en la salida de la iglesia de Santa Rosa, 0.5 km, 1.0 km, y 1.5 km. Estos señalarán el recorrido hecho por los feligreses y según las autoridades se realizan con una inversión de 3 millones de bolívares.
El Paseo de la Devoción tendrá tres kilómetros de adoquinado, de colores azul, verde y gris, los cuales simbolizan el amor y respeto que se le tiene a la Divina Pastora. Este espacio tendrá gravillas de colores, alumbrado, demarcaciones peatonales, esculturas temáticas alusivas a la devoción hacia la Pastora de Almas y arborización.