El director y productor de cine Oscar Rivas Gamboa padre de la exitosa cinta venezolana Muerte suspendida, basada en un secuestro de la vida real, compró los derechos de la historia de Leocenis García, el polémico editor encarcelado cinco veces durante los Gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro en Venezuela.
«Hemos estado conversando desde su salida del Hospital Militar, convenciéndolo, porque lógicamente esto no es una película biográfica, nos interesa el cómo y por qué de toda esa polémica en torno a este muchacho que a los 28 cae por primera vez y funda un grupo editorial amado y odiado a la vez. No es fácil comprender que eso se pondrá en blanco y negro y que, después que firmas la cesión de derechos no tendrás control sobre eso», explica Rivas Gamboa.
La cinta será rodada a partir de febrero, y está titulada Bailando con la muerte, que narra la historia del editor de orígenes humildes que se convirtió en una de las figuras más polémicas de su país. Es una cinta basada en traiciones, poder y un drama muy crudo de los hechos.
El filme muestra episodios públicos y privados del fundador de 6to Poder y su sospechosa relación con el poder: «Los escenarios son réplicas precisas de los reales (…). Se hizo una ardua investigación», cuenta Rivas Gamboa.
La producción y los actores tienen acceso a los informes del caso, fotografías y a los propios expedientes judiciales. También conocen a Leocenis, quien además de haber estado cinco veces presos, ha protoganizado tres emblemáticas huelgas de hambre que lo pusieron cerca de la muerte.
«A diferencia de otros papeles en los que te dan el libreto y tú intentas buscar ese personaje, aquí se trata de personas en carne viva que se ponen en papel», agrega el director.
«Cuando escuchas la historia de Leocenis, obviamente con todas las reservas que puedes tener de un personaje como él, puedes darte cuenta que su historia es muy ruda y dura, es una persona buscando su propia meta. Además como personaje tiene mezclas muy complejas, es un católico, con hijas de matrimonios distintos, lo acusan de corruptelas pero supuestamente lucha contra ellas. Muy complejo, sin duda».
El director Gamboa dice que, el papel de García queda en contar su historia, la cual «hemos adquirido, pero lógicamente hemos hablado con sus enemigos que muestran un lado crítico para él como personaje público, pero que para Leocenis no creo sea una incomodidad. Fuimos muy sinceros con él, queremos mostrar una historia con sus matices, y claro como todo personaje, tiene sus lado luminosos y oscuros».