El zaguero central Carlos Rivero y el mediocampista Aristótelles Romero se convirtieron en las nuevas bajas oficiales del Deportivo Lara con miras al Torneo Apertura 2016 del fútbol nacional de primera división, tras conocerse de su desvinculación y traspaso al Carabobo FC, mediante un comunicado del departamento de prensa de los rojinegros.
Rivero, de 23 años de edad, disputó 15 partidos para la tropa entrenada por Rafael Dudamel, 14 como titular y uno como suplente entre el Torneo Adecuación y la Copa Venezuela. En 1.350 minutos recibió cuatro tarjetas amarillas.
El jugador había llegado en julio procedente del Deportivo Táchira para un pacto de año y medio y generaba muchas expectativas por tratarse del llamado a hacer olvidar las partidas de José Manuel Rey y Jhon Chancellor en el centro de la zaga. Regresará al equipo con el que inició su carrera y de la ciudad de la que es oriundo (Valencia). De allí saltó al Deportivo Anzoátegui.
Por su parte, Romero, oriundo de Calabozo, estado Guárico, y de apenas 20 años de edad, había dejado una muy buena impresión en sus labores como volante. En 17 encuentros, 15 de ellos como titular, jugó 1.408 minutos y también fue amonestado con cartulina amarilla en cuatro ocasiones.
La semana pasada también se produjo la salida del delantero camerunés Arabo Bakary, quien luego estuvo a prueba unos días con el Caracas FC pero no convenció, mientras que otro que recalará en el Carabobo FC tras haber pertenecido al Depor es el preparador de porteros César “Guacharaca” Baena.
A la oncena larense le corresponde iniciar su participación en el Torneo Apertura 2016 el domingo 31 de enero en condición de visitante frente al Trujillanos FC, en el remozado estadio José Alberto Pérez de Valera.
Su clasificación a la Copa Suramericana les supone el reto de tratar de preservar al núcleo de jugadores con el que se logró el objetivo.