Karim Benzema fue suspendido el jueves indefinidamente de la selección francesa por su participación en un caso de chantaje.
El delantero de Real Madrid fue acusado de conspirar para chantajear a su compañero en Les Bleus, Mathieu Valbuena. El caso tiene que ver con un vídeo de índole sexual.
«Decidí que no estará disponible para la selección», dijo el presidente de la federación francesa, Noel Le Graet, quien dijo que la decisión «me rompió el corazón».
Benzema, quien niega haber cometido algún delito, es sospechoso de haber jugado un papel activo para presionar a Valbuena para que negociara con los chantajistas que supuestamente tenían el video.
Francia tiene dos amistosos pendientes, a fines de marzo contra Holanda y Rusia, antes de albergar la Eurocopa a partir del 10 de junio.
A menos que el caso evolucione a favor de Benzema, el ariete no formará parte del equipo y prácticamente queda descartado para la Euro. El técnico Didier Deschamps anunciará su plantel en mayo.
«Si la situación no cambia, entonces no será convocado», dijo Le Graet. «Hay una pizca de esperanza si el caso cambia… mi deseo es que el caso se solucione y estos dos futbolistas franceses puedan darse la mano».
Le Graet indicó que tomó la decisión por su cuenta y luego se la informó a Deschamps, con quien tiene una relación cercana.
«Estamos en una situación embarazosa por este caso, y preferiríamos evitarla», señaló.
Mientras algunos políticos piden que Benzema sea expulsado de la selección, Le Graet cree que el ariete ha sido tratado injustamente en el pasado.
«Esto no cambia que tengo gran estima por este tipo. Creo que es un buen muchacho, alguien que creció en un barrio muy duro y que nunca cambió sus amigos», indicó. «Tengo corazón. Nunca me ha gustado aplicar suspensiones».
Los investigadores no han aclarado del todo el papel de Benzema en la conspiración, aunque creen que fue abordado por un amigo de la infancia para que sirviera como intermediario.
La suspensión se produce cuando Benzema parece atravesar un buen momento con el Madrid, con el que suma cinco goles en sus dos últimos partidos. Además, es el máximo artillero activo de la selección francesa, con 27 tantos en 81 partidos. Le sigue Olivier Giroud con 13 en 45.
