El gran evento anual de las compras otra vez comenzó temprano este año, pero aún no termina el juego. Las cifras iniciales en relación a cuántas personas se dirigieron a las tiendas en el Día de Acción de Gracias todavía no se difunden, pero se espera que más del triple de personas se aventuren el día después de la festividad, conocido como Viernes Negro.
La escritora de Nueva York Sabrina Rajkumar, de 36 años, comenzó a comprar con su madrastra en la tienda Macy’s a las 7:30 de la tarde el Día de Acción de Gracias y daba por terminada su jornada a las 5:30 de la mañana del viernes. Encontró un juego de sábanas por 50 dólares, un vestido para su sobrina rebajado de 74 a 25 dólares y chocolates Godiva por ocho dólares.
«Era una locura, pero no tanto como lo esperaba, aun así había mucha gente hasta altas horas de la madrugada», comentó.
Pero la gente quizá no tenga el mismo ánimo para comprar este año. El índice de desempleo quedó en un sano 5%, pero los compradores aún forcejean con sueldos estancados que no siguen el ritmo del aumento diario en gastos como renta. Y años después, aún esperan los fuertes descuentos a los que se acostumbraron durante la recesión.
Los venezolanos miran desde lejos
La mayoría de los venezolanos se quedaran con las ganas de comprar a través del portal de ventas por internet Amazon, este viernes negro debido a la no activación de los dólares electrónicos proporcionados por Cencoex.
Desde mediados de febrero los dólares electrónicos fueron suspendidos para todos los venezolanos. Las compras electrónicas a través de Amazon eran un desahogo para los venezolanos el día del llamado Black Friday.
Quienes tienen dólares y gift cards de Amazon podrán comprar lo que deseen a través del portal norteamericano, sin embargo tendrán que sortear la manera de como traer los artículos comprados hacia Venezuela.
Algunas empresas que prestan servicios de “couriers” (envíos puerta a puerta desde EE.UU. a Venezuela) cobran un paquete de 5 libras en 5 dólares.