Los conductores que a diario o con frecuencia se desplazan por la calle Urdaneta de la urbanización El Parque, frente a la plaza Soublete y el centro de donantes de sangre, no entienden las razones por las cuales desde la Alcaldía de Iribarren no se han preocupado por el enorme hueco allí existente.
A diario es incontable la cantidad de vehículos que caen en el mismo con los consiguientes daños mecánicos que involucran altas inversiones a los afectados.
“Este era un huequito que cuando comenzó a abrirse pudieron tapar, pero como no lo tomaron en cuenta fue creciendo hasta convertirse en lo que es hoy, un verdadero cráter lunar”, dijo Edwin Pernía, conductor de una unidad del transporte colectivo.
Explicó que más de una vez ha caído en la hondonada al evitar colisionar con otro vehículo cuyo conductor fue sorprendido por la irregularidad de ese canal de rodamiento.
Igualmente, resultan afectados quienes deben acudir al centro de donantes de sangre pues, para no interrumpir el libre tránsito automotor, están obligados a estacionar lejos, exponiéndose a las acciones hamponiles.
Otro profesional del volante advirtió que si la alcaldía no lo tapa en los próximos días llegará un momento en que se extenderá a toda la calle, impidiendo el normal desplazamiento automotor.
Un vecino del sector manifestó que han denunciado la irregularidad a la alcaldía de Iribarren, pero no les han hecho caso alguno, como si la calle Urdaneta de la urbanización El Parque no existiera o que por ella no pasa nadie, cuando es todo lo contrario pues el tránsito de vehículos por alí es contante
Además del enorme hueco, en el sector tienen el problema de la falta de suficiente alumbrado público que permita a los conductores detectarlo en horas de la noche.
“Si no quieren taparlo, al menos que le coloquen alguna señal para que uno no caiga en él”, dijo otro conductor.