Todo proyecto de Ingeniería comprende tres etapas: La Ingeniería conceptual que incluye los análisis de pertinencia, factibilidad y compatibilidad. Los estudios básicos cuyo alcance pasa por estudio geológico, estudio geotécnico, estudio topográfico, estudio hidrológico, estudio hidráulico, estudio de impacto ambiental y estudio de amenaza sísmica. Además, en el caso particular de la avenida Uruguay, estudios de tránsito e impacto social. Todos estos estudios implican complejos ensayos, modelaciones matemáticas, cálculos y análisis en profundidad de los resultados que toman su tiempo y representan el preámbulo de lo que será finalmente la Ingeniería de detalles del proyecto. Estos estudios previos son obligantes y nos permiten desarrollar un proceso analítico, científico y serio que reducirá al máximo los riesgos de errores atribuibles a la pequeña condición humana…
La complejidad del entorno urbano de la vía, exigían tomarse el tiempo suficiente para evaluar con detalle todas y cada una de las variables que directa o indirectamente afectarían su desempeño, a partir de las patologías preexistentes de la zona de afectación de la misma. Esto requería un periodo de tiempo prudencial que no admitía premuras ni presiones de ninguna naturaleza, razón por la cual había que cumplir con todo el protocolo de estudios y ensayos que permitiesen arribar a las conclusiones adecuadas de diseño.
Resulta absurdo pensar que desde el punto de vista profesional nadie es responsable de las omisiones o fallas que se pudieron haber cometido antes, durante y después de la construcción de la avenida Uruguay. El deterioro prematuro, progresivo y recurrente que ha experimentado la vía desde su inauguración en el año 2003, hasta la fecha, evidencian que las cosas no se hicieron bien desde el punto de vista de la ingeniería. En un país donde nadie asume responsabilidades, pasar la página y hacerse de la vista gorda en función de evadir el bulto, resultaría mucho más cómodo, menos problemático y menos comprometedor tanto para este servidor como para la Comisión de Infraestructura del Colegio de Ingenieros del estado Lara que presido. Sin embargo, existe un compromiso muy serio con la ciudad y nuestros agremiados de parte de la actual Junta Directiva del Colegio en función de sentar precedentes orientados a afianzar los principios y valores éticos que animan nuestro ejercicio profesional.
La comisión de Infraestructura no es un tribunal de la inquisición como algunos colegas han querido hacer ver. Hemos evaluado los hechos con la mayor objetividad posible. Si bien es cierto que no tenemos cualidad jurídica para señalar o culpar a nadie por los daños patrimoniales al estado venezolano derivados de una posible irresponsabilidad profesional, sí podemos, y de hecho es una irrevocable decisión tomada, recomendar al comité de sustanciación del CIEL para que remita el caso al tribunal disciplinario del Colegio de Ingenieros de Venezuela, el cual determinará responsabilidades y establecerá las sanciones a las que haya lugar…
Mis comentarios:
.- Será el tribunal disciplinario el que se encargará de establecer las responsabilidades y sanciones a las que haya lugar.
.- Algunos colegas pretenden que la comisión calle y pase la página…
Aguas profundas son las palabras de la boca del hombre; arroyo que fluye, la fuente de la sabiduría…(Proverbios 18:4)
