Un centenar de mujeres caminarán 150 kilómetros para pedirle al papa Francisco que insista en la necesidad de una reforma migratoria cuando visite en septiembre la capital estadounidense.
Grupos como We Belong Together, #Not1More Campaign y PICO organizan el peregrinaje de las mujeres que partirán el martes 15 de septiembre desde el centro de detención York, en Pennsylvania y planean llegar a Baltimore el sábado 19 y a Washington el martes 22 para participar en una vigilia la víspera de la reunión que Francisco sostendrá con el presidente Barack Obama en la Casa Blanca.
Lenka Mendoza, una peruana de 43 años que participará del peregrinaje, dijo a The Associated Press que planea caminar seis horas diarias y realizar actividades en cada población que visite para explicar las razones de su recorrido.
Agregó que el grupo espera transmitirle al papa las historias de inmigrantes sin documentos que recojan durante el trayecto de una semana.
El mensaje de Francisco, el primer papa latinoamericano, resuena con fuerza entre los inmigrantes. Con frecuencia el pontífice ha condenado la indiferencia ante el drama de la inmigración ilegal y ha pedido más compromiso de los gobiernos en su ayuda a los inmigrantes.
La reforma migratoria, que resolvería la situación de 11 millones de inmigrantes no autorizados en Estados Unidos, no ha logado avanzar en el Congreso.
«Cuando la conversación sobre inmigrantes está tan llena de odio, las palabras del papa han sido para nosotros un bálsamo», dijo Alejandra Saucedo, de la organización Dreamers Moms en Florida. «Necesitamos que los líderes oigan el llamado a reconocer las contribuciones y la dignidad de aquellos que han venido por una vida mejor. Esperamos que el papa ponga a la migración en el centro de su conversación con el presidente y el Congreso».
Francisco pronunciará el jueves 24 el primer discurso de un papa ante el Parlamento y visitará la sede de Caridades Católicas de Washington para partir en la tarde a Nueva York, donde el viernes 25 se dirigirá a la Asamblea General de las Naciones Unidas, visitará una escuela en Harlem y oficiará una misa en el Madison Square Garden.
Tras su estadía en Nueva York asistirá el 26 y 27 de septiembre a la Reunión Mundial de Familias en Filadelfia antes de retornar a Roma.