Un tramo de la zona este de Barquisimeto, concretamente adyacente al Banco de Sangre y al Colegio Aplicación, se encuentra lleno de huecos.
Las calles en este sector de la ciudad cada vez más se tornan intransitables, debido a que el deterioro de la vialidad es progresivo y acelerado, terminando por quedar pedazos de capa asfáltica descubierta en lo que se constituye una tronera.
Los vehículos que se desplazan frente al Banco de Sangre caen en el hueco, porque el mismo queda tapado con el agua cuando llueve.
De noche, la situación es similar. En este lugar hay pocas luminarias y a los conductores se les hace difícil precisar el cráter.
Diagonal al colegio Aplicación, al comienzo de la avenida Críspulo Benítez, en sentido este-oeste, también se observa en mal estado esta la capa de rodamiento.
Mario Timaure, conductor, dijo que frecuenta esta zona porque le hace servicio de transporte a niños en edad escolar.
Aprovechó para denunciar que casi todos los días se empoza una laguna de aguas blancas, colindante al colegio, y señaló que desconoce el origen del vital líquido, aunque presume sea el desbordamiento de uno de los tanques subterráneos de alguna casa vecina, por lo que le hace un llamado a las familias de la zona a estar pendientes cuando llenen estos almacenadores para evitar este tipo de situación que acarrea daños al pavimento.
Marisela Charval, llama la atención de Alfredo Ramos, alcalde del municipio Iribarren, para que invierta en asfaltado y bacheo los recursos recabados a los barquisimetanos por concepto de impuestos.
Sostuvo que en esta “Ciudad Ideal”, como la denomina el alcalde Ramos, no debería existir una calle deteriorada para hacerle honor a esa frase.
Indicó que es intolerable haber perdido la cuenta de cuántos huecos hay en la ciudad, y a cuántos les pasa por encima todos los días en su vehículo, y considera que esta situación demuestra que desde la Alcaldía no están pendientes de mantener a la capital larense en buenas condiciones de transitabilidad.
No concibe que los venezolanos siendo amos y señores del petróleo enfrenten una pesadilla en sus calles maltrechas, porque no existe una acertada política de servicios públicos de calidad para los ciudadanos, como lo determina la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
Félix Gómez manifestó que se acostumbró a escuchar en las oficinas del gobierno, no hay recursos, cuando un grupo organizado acude a una instancia para exigir mejoras que eleven la calidad de vida de los habitantes de las comunidades, pero en tiempo de elecciones, como la que se aproxima en el mes de diciembre, ofrecen villas y castillos que a la final incumplen, lo que constituye una burla para el pueblo.
Expuso que así actúan con el tema de los huecos en las calles de Barquisimeto, cuando dicen no poseer la inversión suficiente para emprender las reparaciones del asfalto, no obstante, basta con la inesperada visita de un alto funcionario para verlos haciendo refracciones de última hora para cambiarle el rostro a la vialidad, con una obras de muy mala calidad por el apuro en terminarlas, por lo que transcurrido poco tiempo se vuelve a dañar.
Puntualizó que se requieren calles a la perfección para evitar el desgaste de las piezas que conforman los trenes delanteros de los automóviles, debido a que no se consiguen en el mercado.
