Venezuela no tiene previsto declarar fuerza mayor sobre sus embarques petroleros, pese a que un incendio de grandes proporciones consumió nueve tanques de la mayor refinería del país miembro de la Opep, dejando un saldo de 24 muertos, dijo el sábado a Reuters el ministro de Energía, Rafael Ramírez.
“Todo (el incendio) está confinado al patio de tanques, no hay unidades de proceso afectadas. Ya se apagó el fuego de la esfera principal y se está extinguiendo el último de los tanques”, dijo vía telefónica.
Agregó que se está utilizando espuma para sofocar las llamas y que el reinicio de la planta no debería tomar más de dos días.
“Todo (el incendio) está confinado al patio de tanques, no hay unidades de proceso afectadas”
El también presidente de la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) dijo que en los próximos días la empresa buscará conformar una red de almacenamiento flotante en las costas del occidente del país para paliar las deficiencias en el almacenamiento de crudo y derivados provocadas por el accidente.
Asimismo, se incrementará la operatividad de las refinerías del país para compensar la parada de Amuay, la principal planta del país con 645.000 barriles por día (bpd) de capacidad y que forma parte del Centro Refinador Paraguaná, el segundo mayor del mundo.
Ramírez dijo que hay inventarios de hidrocarburos suficientes para 10 días de exportaciones y suministro al mercado interno, luego de que las autoridades llamaran a la población a no hacer compras nerviosas de combustibles.
Agregó que aún cuando el fuego ha disminuido visiblemente y está confinado al área de almacenamiento de la refinería, falta por sofocar las llamas de un tanque de nafta y controlar pequeños focos de incendio en tuberías y otras instalaciones que se han producido en la últimas horas por las altas temperaturas.