A riesgo de encontrar opiniones contarías a nuestra posición en relación con este asunto. En el cual no somos muy versados. Cabe una pregunta. ¿Existe realmente una música que transforma? En nuestra opinión creemos que sí. En el campo de la vida profesional, muchos conocedores y expertos en tan hermoso tema, a través de la Red, lo exponen con detalles precisos.
Pero en el ámbito cristiano y del Evangelio de nuestro Señor Jesucristo, el cual es donde nos gusta opinar, creemos que la música puede transformar para beneficio o perjuicio del adorador. Esto es, si la música lleva la aprobación del Dios eterno o no lleva la unción del Espíritu Santo. Lo que quiere decir, que pertenece al campo espiritual, por lo cual debe discernirse espiritualmente. El apóstol Pablo lo expone de manera clara. “Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente” 1Cor.2:14.
Para nosotros los cristianos, una referencia poderosa de cómo la música si transforma, la tenemos con David. «Y cuando el espíritu malo de parte de Dios venía sobre Saúl, David tocaba el arpa y tocaba con su mano; y Saúl tenía alivio y estaba mejor, y el espíritu malo se apartaba de él.» 1 Samuel 16: 23. Esta es una evidencia clara de cómo la música ejercía una influencia transformadora en la personalidad del rey Saúl. Pero la razón era, que esa muisca iba en paralelo a la influencia divina. Con toda seguridad la música se adaptaba a los parámetros que Dios establecía y venía de un hombre que no solamente era un excelente ejecutante sino que caminaba de la mano con el Altísimo en entrega y obediencia.
“Se aconsejó a Saúl que buscara alivio en una terapia musical. El sonido de la lira de David y su canto de excelsos himnos aliviaban transitoriamente a Saúl… Cuando Saúl escuchaba la música de David, sus malos sentimientos de compasión propia y celos lo dejaban por un tiempo…” “Indudablemente la reputación de David como músico y hombre de valor, sano juicio y prudente ya se había cimentado antes de que apareciera en la corte y de que venciera a Goliat. Nada podía ocultar el hecho de que el Espíritu Santo, que se había posesionado de su vida de un modo especial desde su ungimiento, estaba preparándolo debidamente para las importantes tareas venideras” Diccionario Bíblico Adventista. El problema de Saúl fue que no la guardó en su corazón.
Sin duda, la música que transforma en el ámbito cristiano ayer, puede ser la que transforma hoy, pero debe llevar el sello divino. El cual, se notará, en primer lugar, por la armonía y el orden como se ejecute y en segundo lugar por la relación santa que el ejecutante tenga con el Creador. Esta música, deberá cumplir con los parámetros establecidos por el mismo Dios. “¡A la ley y al testimonio! Si no dijeren conforme a esto, es porque no les ha amanecido”Isa.8:20 No será entonces, cualquier adefesio musical con letra cristiana cargado de algarabía, altos decibeles, desorden y sensualidad obscena. Y ejecutada por individuos que no “no les ha amanecido” . Estos, a nuestro entender pudieran estar muy lejos de la unción del Espíritu Santo. De allí, el cuidado que debemos tener con la “música que transforma”. ¡Hasta el próximo martes Dios mediante.