Los personajes que encontrarán a continuación, no son desconocidos para nadie. Sin embargo, se hicieron mundialmente famosos por cuestiones que nada tienen que ver con el motivo por el cual se convirtieron en protagonistas de estas líneas, así que presten mucha atención y descubran cuál es esa característica en común que los hace mucho más interesantes
A pesar de que un porcentaje considerable de los habitantes del planeta llevan una dieta carnívora, desde que el mundo es mundo ha existido un grupo nada despreciable de individuos que basan su alimentación en vegetales, verduras, tubérculos y granos, evitando así, a capa y espada, consumir cualquier tipo de alimento de origen animal. De hecho, autores coinciden en asegurar que la primera asociación vegetariana conocida fue fundada en 1847, aunque desde mucho antes ya se hablaba de una dieta vegetal o “pitagórica”, haciendo alusión, obviamente, a Pitágoras, uno de los máximos defensores de esta corriente alimenticia.
Según los expertos, la decisión de no comer animales se debe a diversos motivos, como por ejemplo la necesidad de protegerlos y evitar su caza o explotación, el cuidado de la salud, por religión, por resguardar la fauna o por simple gusto: pero sea cual sea la causa, lo importante es saber que la dieta vegetariana no hace cambios única y exclusivamente en la alimentación, pues sus repercusiones llegan a modificar incluso el estilo de vida de las personas, tal y como lo demostraron estas notables personalidades a través de sus legendarias frases.
“Es lamentable el comprobar que no sólo hay personas que se hacen llamar civilizadas y matan animales, sino que también hay quien se los comen”. Jean Antoine Gleizes
“Aunque todos los lobos y buitres de la tierra se unieran para convencerme de las ventajas de la carne, no por ello dejaría de verlo como un crimen”. Porfirio
Leonardo Da Vinci
Este pintor italiano, también reconocido como anatomista, arquitecto, botánico, científico, escritor, escultor, filósofo, ingeniero, inventor, músico, poeta y urbanista, fue uno de los máximos exponentes del Renacimiento europeo y quien, además de darle vida a inmortales obras maestras, fue un vegetariano acérrimo.
Con respecto a esto último, en una oportunidad dijo sabiamente que “llegará un tiempo en que los seres humanos se contentarán con una alimentación vegetal y se considerará la matanza de un animal como un crimen, igual que el asesinato de un ser humano. Llegará un día en el que los hombres como yo, verán el asesinato de un animal como ahora ven el de un hombre. Verdaderamente el hombre es el rey de las bestias, pues su brutalidad sobrepasa la de aquellas. Vivimos por la muerte de otros. Todos somos cementerios”.
Albert Einstein
Este famoso físico alemán de origen judío, es mundialmente considerado como el científico más popular del siglo XX, uno de los genios más prominentes de la historia y el padre, nada más y nada menos, que de la Teoría de la Relatividad. Pero además de esto, Einstein creía que el vegetarianismo ayudaría al hombre a evolucionar, por lo que pronunció frases como la siguiente:
“Nada beneficiará tanto la salud humana e incrementará las posibilidades de supervivencia de la vida sobre la Tierra, como la evolución hacia una dieta vegetariana”.
Pitágoras
Pitágoras de Samos fue un filósofo y matemático griego considerado el primer matemático puro. Contribuyó de manera significativa en el avance de la matemática helénica, la geometría y la aritmética y luchó, además, por defender las bondades de una dieta vegetariana, con pronunciamientos tan célebres como éste…
“No mojes nunca tu pan ni en la sangre ni en las lágrimas de tus hermanos. Una dieta vegetariana nos proporciona energía pacífica y amorosa y no sólo a nuestro cuerpo sino sobre todo a nuestro espíritu. Mientras los hombres sigan masacrando y devorando a sus hermanos los animales, reinará en la tierra la guerra y el sufrimiento y se matarán unos a otros, pues aquel que siembra el dolor y la muerte no podrá cosechar ni la alegría, ni la paz, ni el amor”.
Franz Kafka
Escritor de origen judío, cuya obra es considerada una de las más influyentes de la literatura universal, y quien parado frente a un acuario, un buen día exclamó:
“Ahora puedo mirarlos en paz, ya no me los como”, haciendo evidente referencia a los peces y demás especies marinas que allí habitan.
Dr. Charles Richet
Este maestro de la medicina, nació en París el 20 de agosto de 1850, y murió el 4 de diciembre de 1935, a los 85 años de edad. Fue un catedrático de Fisiología y profesor de la Sorbona, así como miembro del Instituto de Francia y Presidente de la Sociedad de Biología, cuyas investigaciones acerca de la Anafilaxia lo hicieron merecedor del Premio Nobel de Medicina en 1913.
Acerca de la dieta a base de cernes afirmó:
“No; mil veces no; la alimentación carnívora no es necesaria. Todos los hechos lo prueban así como el ABC de la fisiología”.
León Tolstoi
Fue un novelista ruso, considerado uno de los escritores más importantes de la literatura mundial y autor de grandes obras de renombre como Guerra y Paz y Ana Karénina, máximas exponentes del realismo. Sus ideas sobre la «no violencia activa», expresadas en libros como El reino de Dios está en vosotros, tuvieron un profundo impacto en grandes personajes como Gandhi y Martin Luther King. Con respecto a la alimentación vegetariana, aseguró:
“Si un hombre aspira sinceramente a vivir una vida más amorosa y espiritual, su primera decisión debería ser la de abstenerse de matar y comer animales”.
Nikola Tesla
Uno de los grandes inventores de la humanidad, padre del electromagnetismo, entre muchas otras invenciones que han modelado la vida moderna, este hombre de origen serbio nacido en 1856 fue también un riguroso vegetariano, por lo que defendió incansablemente psu posición asegurando que
“Es ciertamente preferible criar vegetales, por eso creo que el vegetarianismo es lo recomendable para dejar hábitos barbáricos. El que podamos subsistir con plantas y que podamos trabajar a nuestro favor no es una teoría, es un hecho muy bien sustentado”.
Thomas Edison
Este empresario y fecundo inventor, patentó más de mil inventos durante su vida adulta, creaciones con las que le dio a Estados Unidos y a Europa los perfiles tecnológicos del mundo contemporáneo: Las industrias eléctricas, un sistema telefónico viable, el fonógrafo y las películas, al mismo tiempo que defendía el vegetarianismo incansablemente, afirmando que “La no violencia conduce a la ética más elevada, que es la meta de toda evolución. Hasta que dejemos de dañar a otros seres vivos, seremos todavía salvajes”.
