Cuando los vecinos del final de la avenida 5 de la capital del municipio Jiménez pasan frente a una valla ubicada en la avenida Florencio Jiménez donde aparece el alcalde Plaza y se anuncia la colocación de toneladas de asfalto en la reparación de las calles, se preguntan con incredulidad, ¿y dónde sería eso?.
Y tienen razón porque en diferentes sectores de Quíbor lo que se observa no es precisamente el resultado de un progama de acondicionamiento de la vialidad.
Al final de la avenida 5 e igualmente en las calles transversales cercanas a la manga de coleo, el desplazamiento de vehículos se hace con muchas precauciones por la gran cantidad de orificios existentes.
Se trata de un sector donde nunca la alcaldía de Jiménez ha realizado un operativo de mantenimiento de la vialidad y las consecuencias las sufren quienes a diario deben transitar por allí.
No importa si es verano o invierno, para los usuarios de las cuadras finales de la avenida 5 es igual pues siempre están en malas condiciones, con huecos descomunales, zanjas que se convierten en ríos cuando llueve y, por si fuera poco, gracias a algunos malos ciudadanos, también se forman basureros que se constituyen en focos de contaminación para quienes viven en las inmediaciones.
Joaquín Escalona, un vecino, dijo que en varias oportunidades han exigido al organismo municipal tomar en cuenta el final de la avenida 5 y las calles transversales, muy cerca de unas instalaciones del Sistema Hidráulico Yacambú Quíbor, a la hora de planificar planes de acondicionamiento vial.
“Pero nunca nos han hecho caso, como si esto no perteneciera a Quíbor, como si existiera alguna mala intención de cerrar definitivamente el paso hacia y desde la carretera hacia El Tocuyo o a la manga e coleo.
Esta semana la situación se ha agravado a consecuencia de las últimas lluvias caídas sobre la zona y de los pequeños huecos o zanjas se ha pasado a enormes lagunas o pozos donde ya han quedado atascados algunos vehículos pequeños cuando sus conductores fueron sorprendidos por la profundidad de los orificios ahora cubiertos por el agua amarilla.
Para la próxima semana, una vez más, vecinos de la zona oeste de la ciudad tienen previsto acudir a la alcaldía para exigir se haga algo a fin de que ese tramo vial vuelva a ser transitable, algo imposible en la actualidad debido a lo deteriorado en que se encuentra por desidia de las autoridades municipales.
Foto: Elías Rodríguez