Aparte de comunicarnos y compartir contenidos, los smartphones son auténticas herramientas multiuso que nos ayudan a realizar muchas tareas del día a día y nos puede sacar de más de un apuro.
Seguro que siempre que vais de viaje utilizáis el teléfono para encontrar lugares, usar el GPS, realizar fotografías y compartirlas… Hay muchas aplicaciones para conocer los lugares y entender mejor la cultura del lugar.
Sin embargo, una barrera muy importante cuando viajamos a otro país es el idioma. A veces debemos entender determinadas cosas que vemos escritas pero no tenemos conocimientos del idioma. Para eso Google tiene una solución con su traductor para Android. Existen muchos traductores, pero este es probablemente el más conocido.
Google Translate es más completo de lo que pensamos, incluyendo funcionalidades que quizás no sabemos explotar. Por eso, hoy os traemos pequeños trucos que os ayudarán a sacarle partido a esta útil aplicación.
Traducción a través de la cámara del terminal
La primera de las funcionalidades es una de las que ha llegado recientemente, pero resulta tremendamente útil para ser rápidos y prácticos a la hora de traducir. Se trata de poder realizar esta tarea con la cámara de nuestro smartphone, algo que os explicamos en profundidad en su momento.
El procedimiento es tan sencillo hacer clic en el icono de la cámara que nos aparece y colocar el terminal delante del texto. La aplicación traducirá en tiempo real lo que vemos. También existe la opción de escanear un determinado texto y que se traduzca para poder guardarlo posteriormente.
Traducir simultáneamente
Esta funcionalidad es muy sorprendente y a la vez muy práctica. Consiste en poder ir traduciendo un determinado idioma conforme se va hablando. Resulta idóneo para hablar entre dos personas de distintas lenguas.
Lo único que tenemos que hacer para activar esto es pulsar en el icono del micrófono y decir una frase en un idioma. Después, volvemos a hacer lo mismo pero con el otro idioma que queremos utilizar. De este modo, ya la aplicación reconocerá en tiempo real lo que vamos diciendo.
Sin conexión a Internet
Seguramente esta posibilidad es conocida por muchos usuarios, pero no está de más que se mencione. Google Translate nos ofrece la opción de utilizar su servicio sin necesidad de estar conectados a Internet.
Para ello, iremos al apartado de Ajustes, después pulsaremos en Gestionar idiomas sin conexión y seguidamente descargaremos aquellos que nos interesan. De este modo, aunque no tengamos conexión, podremos seguir utilizándolos.
Poder escribir a mano
Hay veces que ciertos idiomas incluyen algunos caracteres difíciles de escribir o simplemente inexistentes en nuestro teclado. Para ello, el traductor de Google nos ofrece la posibilidad de escribir a mano.
Solo tendremos que pulsar sobre el icono del garabato que nos aparece y comenzar a introducir lo que queramos escribiendo con nuestras manos. La aplicación lo irá interpretando y convirtiéndolo a texto convencional. De este modo, podremos hacer la traducción fácilmente.