Algunas personas que utilizan el Sistema de Transporte Masivo de Barquisimeto (Transbarca) solo suben a las unidades y no siguen las reglas.
Luis Barradas, conductor de este medio de tránsito público, expresó que los usuarios deben tomar conciencia y acatar las normas de las unidades para mantener un ambiente de paz.
“Hay personas que no hacen caso cuando uno reproduce el mensaje que dice que caminen hacia la parte de atrás para que otros ciudadanos puedan ingresar al bus”.
Añadió que al hacer caso omiso a las órdenes, se ha visto en la necesidad de levantarse del asiento para pedirle, “de una manera muy amable”, que se dirijan hacia el final o hagan una doble fila y hacerles saber que las personas que están afuera necesitan entrar.
“Es frecuente que lo haga porque hay quienes no están acostumbrados a seguir las normas. Uno como conductor lo que tiene que hacer es tener paciencia y pedir colaboración. Nada fácil”.
Tratar con público es un trabajo complejo, sin embargo, el mejor método para ello, es mantener la calma, respirar profundo y no caer en el enojo y darle el ejemplo a las personas.
Por otra parte, los usuarios deben entender que quienes conducen las unidades en las que trasladan, son humanos al igual que ellos.
Varios usuarios denuncian las decisiones tomadas por algunos operadores de Transbarca, luego de haber tenido alguna discusión, estos se ven en la necesidad de expulsar al individuo.
“A mí, en lo particular, no me gusta bajar a los usuarios que se comportan mal en la unidad, yo busco los medios para entablar el diálogo, y cuando uno es amable, los demás ciudadanos lo apoyan a uno”, comentó Barradas.
Es por esto que, este conductor de transporte público, en su criterio como operador, hay que crear conciencia en la sociedad, educar al colectivo.
“Si todas las personas fueran educadas, estoy seguro que Venezuela sería muy diferente y evitaríamos estos tipos de inconvenientes”.
Normas
El sistema de transporte tiene sus propias reglas, que en su mayoría se incumplen sin pena alguna, entre las normas están: no consumir alimentos ni bebidas dentro de la unidad.
Los asientos identificados con el color azul son estrictamente dirigidos a personas de la tercera edad y mujeres embarazadas, al igual que la zona identificada para discapacitados.
Las unidades solamente se detienen en las paradas identificadas. Algunos individuos se molestan porque no los dejan en los lugares de destino, lo cual ocurre por no ser una zona de desembarque.
Para poder utilizar el servicio, cada persona deberá tener el carné de Transbarca, el cual debe ser recargado para poder cancelar el pasaje de 6 bolívares.
Vías de Transbarca
Algunas personas del Transbarca han estado afectadas desde hace unos meses, sin tener reparo alguno, por lo que diversos usuarios han denunciado esta problemática.
Debido a que por lo general este transbordo va lleno de pasajeros, tanto sentados como parados, les resulta incómodo y peligroso el hecho de que el conductor de la unidad no tome las debidas precauciones y las personas resulten lesionadas.
Ciudadanos como Héctor Paredes y Simón Gómez, manifestaron que el asfaltado debe ser reparado “lo más pronto posible”.
Explicó Gómez que “hace como dos semanas casi me caigo, después de frenar de repente para no caer fuertemente en uno de los huecos de la vía, sino por un señor que estaba a mi lado, me hubiera golpeado”.
Por su parte, Paredes denunció la falta de respeto de los jóvenes por utilizar los asientos dirigidos a las personas de la tercera edad.
“Uno no tiene la necesidad de decirles que nos concedan los puestos de nosotros, porque bastante que luchamos en nuestros tiempos para que ellos tengan el país que hoy tenemos todos”.
Líneas de transportes
Actualmente, Transbarca cuenta con 200 unidades para 10 rutas, distribuidas de la siguiente forma:
– Cují – Tamaca.
– Zona Industrial.
– Villa Crepuscular.
– Cabudare.
– La Piedad.
– La Carucieña.
– Alí Primera.
– Trinitarias.
– Rectorado Ucla.
– Santa Rosa.
Alrededor de unas 600 mil personas utilizan el Transbarca todos los días, lo que equivale al 30 por ciento de la población larense.
Las unidades inician la jornada laboral a las seis de la mañana y culminan a las nueve de la noche, incluyendo los fines de semana.
Los días feriados tienen un horario especial hasta las siete de la noche.
El costo del pasaje es de seis bolívares.