Jorge Castillo, miembro de la Central Cooperativa Nacional de Venezuela (Cecosesola), durante la acostumbrada venta de la feria de verduras, hortalizas y víveres que esta organización realiza en el este Barquisimeto los días viernes, sábado y domingo, habló sobre la activación de firmas que iniciaron el martes de esta semana contra el pago de impuestos a los que el Gobierno quiere someterlos, mediante la aplicación de la ley que obliga a las cooperativas, fundaciones y asociaciones, a pagar tributos tras la reforma de la Ley del Impuesto Sobre La Renta promulgada por el Ejecutivo dentro de un grupo de leyes habilitantes que también abarca el Código Tributario, el IVA, cigarros y el alcohol.
En este sentido, manifestó que las cooperativas están fuera de cargas y obligaciones en materia tributaria.
Por lo tanto, dijo, en enero de este año se reunió el movimiento cooperativo nacional para tratar el tema y hacerle frente, ya que de pagar dejarían de emprender importantes obras sociales para las comunidades más necesitadas, principalmente en el área de salud, con los excedentes que les quedan.
Señaló que tanto la Alcaldía, la Gobernación como Corpolara, han atendido este planteamiento, pero sin obtener respuesta satisfactoria.
Manifestó que con los excedentes recabados en el año han ampliado la feria de las hortalizas, aumentado el pote de compra para la adquisición de víveres y contribuyen para que los productores compren semillas para sus invernaderos, de manera que las verduras llegues con mayor calidad a los consumidores.
En materia de salud, estos excedentes los reinvierten para atender anualmente a 140 mil familias, realizan más de 60 operaciones semanales y jornadas de otorrinolaringología, operaciones de amígdalas y adenoides semanales, así como jornadas de vacunación.
Se mostró satisfecho por la recolección hasta ayer de más de 30 mil firmas de trabajadores asociados, familiares, productores y compradores.
Expuso que si el Gobierno los obliga como cooperativa a pagar impuestos, tendrían que desembosillar más de 76 mil millones de bolívares al año, por concepto de impuesto sobre la renta, IVA, impuesto municipal e impuesto de débito bancario, entre otros, y en virtud de ello, se verán forzados a realizar otras actividades ajenas a este movimiento, en perjuicio de 140 mil familias que atienden semanales en las ferias de consumo de alimentos.