Quizá una de las principales fallas que se ha tenido en la promoción de la obra del sistema hidráulico Yacambú-Quíbor ha radicado en no dar a conocer a las nuevas generaciones acerca de las bondades de un proyecto que nació hace casi medio siglo y ha atravesado por innumerables accidentes que lo han retrasado y sumido en una especie de punto muerto en la conciencia colectiva.
Una “inauguración” tantas veces pospuesta
En julio de 2012 el entonces presidente Hugo Chávez vino a Lara y aseguró que el valle de Quíbor estaba a punto de explotar en un maravilloso emporio agroindustrial que sólo era posible en revolución. ¿Cuándo? ¡En breve!
Dijo que a partir del invierno del año 2013 se comenzaría a llenar la represa de Yacambú. “En 2014 debemos abrir el chorro”.
Barquisimeto, auguró, podría contar con los 3.000 litros de agua por segundo que le faltaban.
La obra del Gobierno apunta siempre al futuro, a la promesa reciclada. Veamos.
En su Aló Presidente número 148, trasmitido desde la represa de Yacambú, el domingo 4 de mayo de 2003, Chávez dijo que los trabajos avanzaban con “rapidez” y ofreció la obra para inaugurarla en “poco más de tres años”. Es decir, en 2006. Así lo precisó: “Estamos avanzando a buen pie, a buen paso, para inaugurarla a finales del 2006”.
No obstante, está registrado que en un Aló Presidente, desde Cuara, municipio Jiménez, el 9 de octubre de 2005, dijo que el proyecto Yacambú-Quíbor “terminará antes de 2010”.
En su Aló Presidente número 316, desde Caicara del Orinoco, estado Bolívar, el domingo 3 de agosto de 2008, cuando Quíbor cumplía 338 años de su fundación, hubo un pase en vivo hacia el portal de salida del embalse, con el entonces gobernador del estado Lara, Luis Reyes Reyes, quien pronosticó que “el agua debe estar llegando tanto al sistema de riego como al sistema de potabilización, a partir del primer mes de enero 2011”.
Más tarde, cuando faltaba poco para las elecciones parlamentarias de septiembre de 2010, vino a Lara y aseguró que la presa de Yacambú estaría lista a finales de 2011 y que en enero de 2012 el agua llegaría a Barquisimeto.
NAhora, el sábado de la semana pasada, inmerso en otra campaña electoral, viene y larga que “en 2014 debemos abrir el chorro”.
Lo peor de todo es cuando la mentira no es para salvarse sino para hundir. Lo serio es cuando hay un especial gozo en embaucar, en manipular, en confundir. Lo grave es cuando la recurrencia a escudarse en la mentira se convierte en una enfermedad, llega a formar parte de una patología.
Erick Castillo: Urge reactivar el proyecto
“He oído algo sobre el proyecto del Sistema Hidráulico Yacambú Quíbor. Desde hace mucho años, estaba muy joven. Creo que se trata de un proyecto para traer agua a Barquisimeto, una mayor cantidad. La verdad no sé muy bien de qué se trata. En los últimos años no ha habido mucha información al respecto, sólo que está paralizada la obra. En un principio todos estábamos esperanzados porque se dijo que el Sistema Yacambú iba a surtir de agua a la ciudad sin deficiencias, ni cortes de agua. La región requiere urgentemente de este proyecto porque hay zonas dondeel agua llega una vez a la semana, en otras cada 15 días. Hay gente que debe levantarse de madrugada a cargar agua. Yo vivo por el oeste y es mi caso, igualmente, cobran por el servicio”.
Lourdes Gómez: Prioridad
“He escuchado sobre el Sistema Yacambú Quíbor pero creo que pocos recordamos para qué serviría. No tengo conocimiento y creo que las autoridades tienen que ofrecer más información al respeto, sobre todo a las comunidades. Si se trata de agua es un tema muy importante porque en poblados como Bobare no llega el servicio de agua y eso es una prioridad, el agua no tiene sustitutos. Hace mucha falta que se consolide el sistema del agua. En Bobare compramos el agua que nos llega a través de cisternas pero no sabemos si es potable porque tiene sedimentos, además que debido a la necesidad la tenemos que comprar a precios muy elevados. Se estaba haciendo un proyecto para introducir el agua a la localidad pero eso se quedó en veremos”.
Moraima Urquiola: Servicio de agua falla
“Lo que sé sobre el Sistema Hidraúlico Yacambú Quíbor es que no se ha terminado. Lo único que sé es que la obra no se ha concluido, creo que leí que ha avanzado un 80%, que falta un 20% para su culminación y puesta en marcha. Sin duda la ciudad tiene muchos problemas de agua y creo que el Sistema Yacambú Quíbor solventará esa crisis. Es muy necesario para todos que se termine ese proyecto para solucionar el problema del agua en Barquisimeto.
En las comunidades del oeste, donde yo habito, los vecinos tenemos que comprar el agua. Actualmente hay mucha escasez de agua, las personas padecen mucho por ello. Algunos pasan hasta 20 días sin el vital líquido. Para el oeste el agua es racionada llega dos veces por semana”.
Luis Arroyo: Reactivar la obra
“Sí, conozco un poco acerca de ese proyecto. Creo que es posible reactivar la obra y luego de eso no pararla más. Las autoridades deben encargarse.
Algunos dicen que se está trabajando en el lugar, otros dicen que está paralizada, pero yo creo que hay que poner empeño para que se cristalice el Sistema de Yacambú Quíbor por el beneficio de todas las comunidades. Yo vivo en Santos Luzardo y el servicio de agua en la zona llega un día si y otro no. Eso ocurre desde hace mucho tiempo. No compramos agua por cisterna. Hay que tomar suficiente agua el día que llega. Creo que existen muchos problemas de agua en la región y en el país. Las personas deben involucrarse y conocer todo sobre el servicio de agua”.
Alicia Peraza: Yacambú es vital para todos
Para el presidente de la Asociación de Comerciantes del municipio Jiménez la obra de Yacambú es vital para todos, no sólo para quienes allí han trabajado, porque el agua es necesaria para la agricultura, la industria, la población en general.
Informó que se está organizando un foro en el que participen todos los sectores del municipio para instar al Gobierno Nacional a que apruebe los recursos necesarios para reactivar y terminar tan deseado proyecto.
“Es necesario que todos estemos plegados a esta lucha porque Yacambú es una necesidad que ha sido un elefante blanco desde hace unos cuantos años, pero ya es tiempo de que se haga realidad, que se acabe el misterio de tantos millones allí se han invertidos”.
Alicia Peraza: “El agua que necesitamos”
“Desde que tengo uso razón estoy oyendo hablar de Yacambú y nada que lo terminan, y pensar que eso sería la solución al problema de la falta de agua que tanto necesitamos en Quíbor”, afirma Alicia Peraza, peluquera y ama de casa, para quien el proyecto hidráulico es una necesidad.
No entiende las razones por las cuales desde hace años escucha informaciones sobre aportes millonarios, así como cambios de empresas constructora encargadas de la obra y ninguna la termina.
¿Desde hace cuantos años sabe de Yacambú?
Na’guará, no hombre, como hace más de 30 años.
¿Ahora si tiene esperanzas de que lo terminen?
Esas esperanzas han existido, sobre todo desde hace tres años, pero nada que terminan, responde.
Luis Flores: “Es una alcancía rota”
El hoy comerciante, anteriormente fue agricultor, pero tuvo que cambiar de ramo por las dificultades en disponer de agua suficiente para el riego de las siembras.
“Yacambú representa para el municipio Jiménez desarrollo, progreso, esperanzas, porque es la única que tenemos ya que a causa del verano los agricultores están parados, por falta de agua, y ahora por los insumos, después que cerraron Agroisleña”, expresa.
Indica que muchos de los agricultores de Jiménez han emigrado a otras regiones, lo que ha dejado como consecuencia una disminución en las producciones de hortalizas”.
Además, considera que Yacambú “es una alcancía rota porque no se sabe a dónde van a parar los recursos”.
Oswaldo Mendoza: “Debemos unir fuerzas”
El concejal Mendoza considera una necesidad que todos en el municipio Jiménez unan sus fuerzas en pro de ese proyecto que lleva más de 40 años en desarrollo y no se ha concluido por trabas administrativas.
“Puede que hayan existido fallas con respecto a la importancia de la obra para los pobladores, de los beneficios que se obtendrán con el agua que regará el Valle de Quíbor”.
Piensa que debe concientizarse a la población sobre lo que será ese sistema hidráulico, no sólo para los grandes productores agrícolas sino también para los medianos y pequeños, así como para la industria, amas de casa y hasta el turismo.
