Hasta diciembre pasado, Mikel Villanueva era uno más en la plantilla del Deportivo Lara. Hoy día es titular indiscutible y figura de mucho peso dentro del club. Su desempeño en el lateral izquierdo ha sido preponderante en la buena campaña del rojinegro, acomodado en el quinto lugar de la clasificación correspondiente al torneo Clausura y con posibilidades matemáticas de cargar con el título.
Es determinante en defensa, su tarea principal. Luce como una muralla por la banda izquierda, con mucha rapidez, capacidad de anticipación y recursos físicos para frenar a los rivales. Y -enorme plus- tiene la virtud de marcar goles, bien de cabeza o con llegadas a balón dominado, porque es técnico y sabe utilizar su pierna hábil.
El de San Cristóbal, que llegó al cuadro crepuscular el año pasado tras ser descartado por el Deportivo Táchira, es, sin duda, una de las revelaciones del certamen y atribuye su buen juego a la confianza que recibe de su técnico y a la que tiene en sí mismo, en sus capacidades dentro del rectángulo.
“Se debe a la confianza y al trabajo”, respondió en declaraciones al departamento de prensa del cuadro larense, tras interrogársele por la “receta” para su buen accionar en el presente semestre.
“Trabajo en estar positivo en el día a día. Ayudan mucho también los consejos que me dan los profesores (integrantes del cuerpo técnico), ya que uno es muy joven y está empezando en el fútbol, por lo que siempre hay que escuchar los consejos para buscar aplicarlos cada domingo”, agregó el jugador de 21 años, una grata noticia para el balompié nacional, porque tiene proyecciones, incluso, de selección nacional, en una posición en la que no hay muchos aspirantes.
“Siempre me caractericé por tener tranquilidad en el juego. Gracias a Dios me está resultando bien, debo seguir trabajando, no he logrado nada aún, voy por más. Ahorita el equipo se ve increíblemente bien y muchos de los compañeros están teniendo esa misma confianza y se nota en cada partido con mayor fútbol”, adicionó.
Villanueva reconoció que, pese a su actuación destacada, no se siente del todo satisfecho y siente que debe mejorar, en una posición en la que había jugado antes, pero no con tanta regularidad, porque habitualmente era alineado como defensor central, con los equipos juveniles del Táchira.
“Me hace falta un poco más de ritmo de juego, creo que a veces me cuesta un poco, me ahogo porque de lateral existe mucho más desgaste que de central y a veces uno no sabe controlarse. Hay momentos en que no debo pasar (al ataque) y sin embargo lo hago, pero soy un joven que está empezando e iré aprendiendo con los minutos jugados”.
Villanueva se prepara para hacer frente a un duelo de sabor especial, toda vez que el Lara enfrentará al Táchira, aunque en una fecha por definir, ya que no se disputará el próximo domingo como estaba previsto por los compromisos del equipo aurinegro en Copa Libertadores, específicamente ante Sporting y Racing.
Carlos José Méndez
Foto: Cortesía Deportivo Lara
