Una rectificación en la política económica con carácter de urgencia plantea la Confederación Venezolana de Industriales, ante la crisis que vive el país y que se refleja en una drástica caída de la producción interna, con una inflación de 68 % en 2014 y de 102 % en el sector alimentos.
En este contexto, proponen se conceda prioridad a la producción nacional sobre la importación de productos terminados; que se apliquen los ajustes oportunos de precios para que las empresas puedan producir más sin pérdidas; que se permita el libre flujo de bienes y servicios, para que todos los ciudadanos puedan adquirirlos sin restricciones ni racionamiento;que la industria tenga acceso a las divisas para que pueda contar con los insumos y materias primas que requiere para producir localmente; que se propicie un sistema cambiario libre y único; que se propicie un clima de confianza en el país que permita aumentar las inversiones nacionales y extranjeras;que se fortalezca la seguridad jurídica, se respete el derecho a la defensa y se evite la presunción del delito sin investigación previa; que cesen la persecución y los ataques contra la empresa privada y se respete la propiedad y que se produzca un diálogo efectivo para analizar las propuestas del sector privado de la economía con la finalidad de que se logren acuerdos para generar más producción y empleo.