El Deportivo Táchira encara este miércoles un desafío de vida o muerte al recibir al Guaraní paraguayo, con la obligación de salir victorioso para mantener vivas sus posibilidades de clasificación a la siguiente fase de la Copa Libertadores.
El compromiso se juega en el estadio Pueblo Nuevo de San Cristóbal desde las 8 y 30 de la noche, con el arbitraje del colombiano José Buitrago.
El Carrusel Aurinegro le hace frente al mismo equipo que una semana atrás le endosó una goleada por 5-2 en Asunción y lo dejó en situación complicada en el grupo 8 del torneo de clubes más importante de Suramérica.
Con apenas un empate en tres salidas, el cuadro tachirense está relegado a la casilla de fondo de la llave, debajo del Racing argentino (6 puntos), el Sporting Cristal peruano (5) y el mismo Guaraní (4). Sin embargo, puede volver a la vida esta noche con un triunfo frente a los paraguayos, que, de su lado, vendrán con la misión de llevarse al menos un punto.
Para dar en el blanco con su objetivo de ganar el partido, el conjunto dirigido por Daniel Farías debe mejorar su juego en faceta defensiva, evitar los errores y distracciones que le llevaron a recibir cinco goles en su anterior duelo con Guaraní. De hecho, es el equipo más goleado del grupo con 12 anotaciones recibidas, por cuatro marcadas. Y tiene que bregar con la ausencia de Wilker Ángel en el centro de la zaga, lo que abriría espacio a Carlos Rivero para hacer pareja con el argentino Javier López, Gerzon Chacón y Yuber Mosquera por los laterales.
Podría decirse que más que tres puntos, está en juego el orgullo y la dignidad de un elenco tachirense armado para trascender en el escenario internacional y que, en cambio, ha tenido una floja participación.
El club ya recibió un baño fresco de motivación con su reciente victoria por goleada frente a Mineros en el torneo local, pero la única forma de cobrar venganza por la “afrenta” que significó la caída estrepitosa en Asunción es ganarle al Guaraní en casa, sin importar cual sea el marcador.
En el costado ofensivo, el conjunto atigrado centra todas sus esperanzas en el olfato y capacidad de Gelmin Rivas, máximo artillero del certamen criollo y que viene de marcarle cuatro dianas a Mineros.