En la vereda tres de la urbanización Bararida, frente a la sede regional del Ministerio de (PP) de Transporte y Comunicaciones (MTC), protestó un grupo de vecinos en rechazo a la construcción familiar que realiza uno de los habitantes, en un área prevista para la jardinería y recreación.
Luz Marina León, manifestante, declaró que el terreno donde fue construida la casa es propiedad del Instituto Nacional de Vivienda (INAVI) y, en ese lugar, tienen previsto crear un parque infantil con caminerías para el disfrute del vecindario
“Una vecina, la de la casa número dos, vendió el terreno a pesar que no le pertenece. La comunidad necesita sus áreas verdes y, de manera arbitraria, nos fue quitada esa posibilidad”, sostuvo León. Dicho terreno consta de 540 metros cuadrados.
Por su parte, Kelsi Aldana, otra de las vecinas que protestó, advirtió que el presidente del Inavi, ingeniero Vladimir Silva, solicitó a la Oficina de Catastro de la Alcaldía de Iribarren, que demostrara si efectivamente había sido otorgado el permiso al ciudadano Wilmer Romero.
Sin embargo, esa dependencia municipal alegó que en la Dirección de Planificación y Control Urbano no tienen constancia o registro del terreno.
Mientras tanto César Tovar, representante legal de la familia Romero, propietaria del inmueble, aseguró que la Alcaldía y Ministerio (PP) del Ambiente, en el caso de la poda de los árboles, otorgó los permisos correspondientes.
“Si bien es cierto que fue después de iniciar la construcción, cuando nos enteramos que el terreno era del Inavi, también es cierto que el terreno es un área libre y no un área verde. Mi cliente ha actuado apegado a las leyes y normativas del municipio. Además, en la familia Romero hay niños y adolescentes que tienen derecho a una vivienda, consagrado en la Constitución venezolana”, sostuvo el abogado.
Desde el tres de este mes, está paralizada la construcción de la vivienda, en la parte superior.
Fotos: Jairo Nieto