Los resultados de laboratorio realizados sobre el arma de la que salió el disparo que mató a Alberto Nisman solo tenían muestras de ADN del fiscal argentino, lo que fortalece la hipótesis del suicidio, informó la justicia este viernes.
«En la pistola, cargador, cartuchos y vainas se halló un mismo perfil genético que coincide con el perfil genético de la muestra referida como indubitable del occiso», indicó un comunicado de la fiscal Viviana Fein, quien investiga el caso.
Fein había solicitado una pericia de ADN sobre material secuestrado el 19 de enero, al día siguiente de aparecer muerto Nisman, lo que incluye además de la pistola, el cargador, los cartuchos y las vainas, una camiseta y el pantalón corto que tenía puestos la víctima.
El fiscal que investigaba el atentado a la mutual judía AMIA llevado a cabo en Buenos Aires en 1994 con un saldo de 85 muertos, fue encontrado con un balazo en la sien en el baño de su departamento del barrio de Puerto Madero, en un lujoso edificio rigurosamente vigilado.
El cotejo de ADN fortalece la hipótesis del suicidio del alto funcionario judicial, después de que los peritos que hicieron la autopsia, el 19 de enero, habían concluído que «no hubo intervención de terceras personas».
La muerte de Nisman, aún sin esclarecer, se encuentra rodeada de conjeturas y suspicacias, ya que el fiscal murió el domingo 18, en vísperas de explicar en el Congreso una denuncia contra la presidenta Cristina Kirchner por «encubrir» a Irán en la causa por el atentado antisemita de 1994 en Buenos Aires.