El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, arribó esta madrugada a Costa Rica acompañado de fuertes medidas de seguridad, para asistir a la III cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) que comienza hoy en la provincia de Heredia.
Rodeado de su escolta personal, Maduro descendió del avión de la Fuerza Aérea Venezolana y de inmediato se trasladó hacia un hotel de San José sin detenerse a brindar declaraciones a la prensa, informó DPA.
La noche del martes, en Caracas, el gobernante dijo que en Costa Rica existe «un grupo de terroristas» que intentan asesinarlo pero que de todas maneras viajaría a este país centroamericano.
Según Maduro, la cumbre pretendía ser saboteada por la visita a Caracas de los ex presidentes de Colombia Andrés Pastrana; de Chile Sebastián Piñera y de México Felipe Calderón.
Los ex presidente participaron en un foro político y expresaron su apoyo a la oposición venezolana.
El objetivo de esa reunión era «evitar que yo fuera a Costa Rica. Hay un grupo de terroristas en Costa Rica que han llegado ya para tratar de amenazarme», aseguró el presidente Maduro.
«Hemos tomado todas las medidas de seguridad (y) el gobierno de Costa Rica nos está prestando todo el apoyo», añadió.
Costa Rica anunció que desplegará 300 efectivos -entre guardias civiles y policías de tránsito- en torno al centro de eventos Pedregal, en la localidad de San Antonio de Belén (Heredia), donde 33 mandatarios y cancilleres se reunirán hoy y mañana.