Estimado Presidente Pastrana,
Estoy muy agradecido con su visita a Venezuela y con el intento de visita a Ramo Verde. Tenía la esperanza de que les permitieran pasar para poder conversar sobre el presente, pero sobre todo, sobre el futuro de Venezuela.
En unos días cumplo un año en prisión, pero mi alma y mi mente están libres como la esperanza de ver libre a mi país pronto. Quiero transmitirle la certeza de que a pesar de todos los obstáculos, hoy Venezuela está encaminada hacia un cambio profundo en donde la solidaridad, el crecimiento económico y el respeto a los derechos de todos sea la prioridad del Estado y de la Nación entera.
Las razones por las que estoy preso siguen vigentes, la necesidad urgente de un cambio profundo para Venezuela. La ruta para lograr el cambio es la convocatoria a todos los venezolanos para sustituir, por los mecanismos que establece la constitución, a quienes hoy han traído al país al colapso generalizado. La inmensa mayoría de los venezolanos aspiramos ese cambio, pero debemos confrontar un obstáculo poderoso representado por una pequeña elite corrupta e ineficiente que ha tomado por asalto las instituciones del Estado.
Le solicito muy respetuosamente que nos apoye llevando a su país y a otros de la región su testimonio de lo que pudo vivir en estas horas que ha compartido con los venezolanos, pero también que dé testimonio de la legítima, democrática y constitucional aspiración que tenemos quienes hoy buscamos el cambio en Venezuela.
Desde mi celda en Ramo Verde y con el corazón lleno de sueños de libertad, justicia y paz para Venezuela le mando un fuerte abrazo.
Su amigo,
Leopoldo López
Preso de conciencia