Dos ofensivas blindadas de principio a fin garantizan una final electrizante en la LVBP. Caribes de Anzoátegui y Navegantes del Magallanes protagonizan una serie que promete emociones a granel.
Se reedita la final de la temporada anterior. El conjunto naviero va por su tercera corona en fila, después de ganar las dos ediciones anteriores, mientras la novena oriental busca revancha con una nómina plagada de talento.
Aunque Magallanes no cuenta con sus principales figuras de Grandes Ligas como en años anteriores, la novena que dirige Carlos García es el rival a vencer, después de llevarse los dos últimos títulos.
Caribes, por su parte, presenta una rotación sólida que sumó a Junior Guerra en el draft de sustituciones, además de contar con Daryl Thompson y José Álvarez para los dos primeros choques en Puerto La Cruz.
Guerra será el abridor del cuarto juego. El derecho se incorporó a su nuevo equipo para los entrenamientos previos al inicio de la serie y realizó una sesión de bullpen.
“Si gano el campeonato con Caribes cerraría con broche de oro esta temporada que fue bastante buena para mí” comentó el lanzador a los periodistas en Puerto La Cruz.
La divisa anzoateguiense tiene a su favor la ventaja de abrir la serie en el estadio Alfonso “Chico” Carrasquel de Puerto La Cruz, además de contar con Omar López como estratega, quien viene de ganar el premio Mánager del Año.
Además, Caribes tiene un bullpen sólido y una de las ofensivas más productivas y consistentes de toda la temporada.
Balbino Fuenmayor no paró de batear desde que se adueñó de la titularidad de la primera base. En el round robin cargó con el equipo sobre sus hombros y sus conexiones de larga distancia no dejan de impresionar.
Magallanes enviará a la lomita a Omar Poveda para el primer asalto en territorio oriental. “El Almirante” anunció que Chris Leroux y Josh Lowey van a los juegos dos y tres, mientras el resto está por definirse, aunque el estratega asomó la posibilidad de que el grandeliga Johan Santana ocupe el cuarto o quinto puesto de la rotación.
Deolis Guerra realizó una sesión de bullpen el jueves para probar su estado físico y quedó prácticamente listo para la final. Su regreso al roster activo es esperado luego de conocerse que Jean Machí no podrá estar en el cuerpo de relevistas de los turcos.
El setup del año se reincorpora a un bullpen de lujo, que también cuenta con Hassan Pena -Cerrador del Año- y el zurdo José Mijares, además del dominicano Máximo Nelson. Un cuarteto que puede garantizar el triunfo si el equipo llega con ventaja a los tramos finales.
Josmil Pinto y Yangervis Solarte son las dos incorporaciones de Magallanes para la final. Adiciones de lujo llegaron para cubrir la falta de profundidad en el costado ofensivo que presentaba el equipo.
Solarte será el titular de la tercera base, mientras Pinto podrá jugar como receptor o bateador designado. Ambos toleteros viene de una brillante actuación con Tigres de Aragua durante la temporada regular y el round robin.
Se pronostica una serie de batazos. Magallanes cuenta con Endy Chávez, Ramón Hernández, Ronny Cedeño y Adonis García en el corazón ofensivo, además de las referidas incorporaciones de Pinto y Solarte.
Caribes, por su parte, presume con Alexi Amarista, Niuman Romero, Balbino Fuenmayor, Félix Pérez, José Castillo, Oscar Salazar y compañía.
La final se disputa sin descanso entre los siete compromisos, por lo que la estrategia a la hora de llevar y administrar a los lanzadores juega un papel importante.
Se trata de una serie en la que se enfrentan los dos equipos más consistentes de los últimos años.
Magallanes, que va a su tercera final consecutiva, busca el título número 13 de la franquicia, mientras Caribes, con cuatro series decisivas en los últimos cinco años, trata de conseguir su segundo campeonato.
La voz de play ball se escuchará a las 7.30 de la noche en el estadio de Puerto La Cruz. La escena está servida para el inicio de una serie con sabor a revancha, donde los protagonistas se enfrascan en una férrea lucha por el título.