A las ocho de la mañana de ayer, funcionarios de la Policía Regional fueron notificados sobre el cadáver de una persona en las cercanías del Distribuidor El Ujano, en plena Circunvalación Norte. Allí, en medio de piedras y un corto camino, estaba boca abajo un joven sin identificar, de piel morena y con pantalón corto beige.
Nadie vio lo ocurrido, pero por las evidencias colectadas en el sitio, se supone que lo hicieron correr para luego dispararle. Al menos cuatro impactos de proyectiles habría recibido en su humanidad.
A las 4 de la tarde, llegaron funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), para levantar el cadáver y trasladarlo hasta la morgue del Hospital Central.
En la escena del crimen, además de las conchas de balas, había par de chancletas color negro, que permanecían a un metro de la carretera.
Algunos curiosos desde lo alto de la montaña se asomaron, pero no dijeron nada.
