Qué opina usted de los servicios

Reflexiones en positivo
Para poder estar informado de la realidad de lo que sucede, de lo que piensa, de lo que es cotidiano en la población, no basta con leer y observar en los medios de comunicación masiva, hay que intercambiar ese quehacer diario en las colas de pago del mercado, del teléfono, y prácticamente de todos los servicios públicos, incluyendo ya el entrar a un baño o el de recibir la atención en una consulta medica y como pueden observar son servicios prestados por entidades publicas y privadas.
En esa actividad de perder o pasar el tiempo en estas colas es cuando aflora en la mente y en los labios de esa población comentarios como estos “la Cantv une a la Gente”, es una empresa publica que no comunica pero que si une a la gente en esas colas a murmurar del mal servicio que prestan, que no envían los recibos, que hay pocas oficinas recaudadoras del pago, que en ellas no existe punto de venta, que hay que pagar en efectivo y pare de contar cuando pasa a hacer los comentarios del servicio de agua que no llega, que se cobra sin prestarlo, que en forma unilateral se le impuso una tarifa plana, que es una estafa y de allí se salta al servicio eléctrico que ya no vale la pena hacer mas comentarios.
Esta conversación pasa a otros términos cuando la señora manifiesta que va a llegar tarde a la consulta odontológica prevista mensualmente, para enderezarle los dientes y que ya lleva 7 años de pago mensual que comenzó con 70 bolívares y hoy paga 400 bolívares, que se le prometió un trabajo para dos años y que al día de hoy no sabe cuándo culminará ese trabajo. Mas no deja otro de participar que tiene que ir al mercado a comprar lo del almuerzo y casi está seguro que es otra cola que tiene que aguantarse y como dice una propaganda tal vez tenga suerte de conseguir lo que voy a buscar.
Me llamó poderosamente la atención que fue precisamente en esta cola de mercado que sucedió algo que llamó mi atención, cuando alguien avisó que había llegado aceite y pollo importado y una inmensa mayoría abandó la cola para proveerse de esos productos y alguien manifestó que se alegraría mucho más si ese pollo o ese aceite fuese producido en Venezuela, a lo que otra persona respondió en forma un poco altanera: Es que ahora hay mas gente que tiene dinero para comprar lo que quiere. Como respuesta recibió en forma pausada el comentario que esto podría ser cierto, pero no esa justificable porque si había mas gente para consumir pollo, si había más dinero para comprarlo, de la misma forma tenía que haber mayor cantidad de fábricas de alimentos para pollos, de granjas para producir pollos, de mataderos para arreglar pollos, de transporte para trasladar pollos y mayor cantidad de mercados para comercializar pollos y como tal generarían esa inmensa cantidad de empleos primarios y secundarios que bajarían en un alto porcentaje ese falso índice de desempleo que se dice que existe y que permitirían tal vez ocupar en algo productivo ese 54% de personas dedicadas a la buhonería que gobernativamente se le dio el nombre de comercio informal.
Como observador me trajo muchas reflexiones e inmediatamente me ilumino la pantalla del televisor y la pagina del periódico de la propaganda y la información, de la necesidad tan apremiante que hay de transformar al venezolano para el trabajo productivo, para el verdadero sentimiento nacional, para el orgullo de lo nuestro y para ver mas allá de la beligerancia política, que entender que los gobernantes llegan y pasan, pero no así nuestro territorio con potencial productivo y dentro de este enfoque el informar que ese ingreso al Mercosur, no llega mas allá de tender puentes al desarrollo de inversiones en otros países para satisfacer nuestro mercado y tanto es así que me causa hilaridad cuando alguien manifestó que se veía con buenos ojos y que apoyarían las inversiones de los inversionistas privados de las naciones del Mercosur en Venezuela, hecho que de por sí prácticamente está descartado, cuando están conscientes que en sus países tienen seguridad jurídica, económica y política y en Venezuela como lo observan tienen seguridad de colocación de su producción no importa que vaya en detrimento de nuestro desarrollo y como dice el refrán “en las puertas del cielo primero yo que mi padre”, así dirán estos gobernantes de estas naciones que observan en Venezuela un país petrolero con hambre.
Unidos todos por la producción nacional.
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@JGmendozabgto