Sentado, con los pies cruzados al igual que los brazos, así quedó el cuerpo sin vida de un hombre de 27 años, identificado como Johnny Jesús Mendoza Rodríguez, quien fue asesinado entre la noche del domingo y la madrugada de este lunes de una descarga de escopeta en el cuello.
El cadáver quedó a orillas de la carretera del caserío Agua Salada, sector Campo Alegre de Crespo. A unos metros, una gorra verde alusiva a la campaña presidencial de Nicolás Maduro y dos teléfonos celulares que presuntamente cargaba.
El hoy occiso, se desempeñaba en vida como cuidador de reses, trabajo que lo hizo trasladarse desde su tierra natal, Maracay, estado Aragua, desde Semana Santa de este año.
Karina Chatín, la pareja del fallecido, comentó que él se vino para ayudar a su madre en el trabajo del campo, por lo que se conocieron y decidieron compartir su vida.
«La última vez que lo vi con vida fue el domingo en la tarde cuando bajó desde el cerro para llevar a su mamá al Eneal para agarrar el autobús, pues se iba para Maracay».
También iba a cargar la batería de los celulares, puesto que donde habitan no hay servicio eléctrico, de igual manera compraría gasoil, por lo cual cargaba su burro.
«Él nunca dejaba de llegar a la casa; yo me empecé a preocupar porque no aparecía. Hoy (lunes) decidí bajar a pie, unos 30 minutos hasta el pueblo, para ver qué pasaba. En ese momento me fue a buscar un muchacho que fue quien me dijo que a mi esposo lo habían matado».
La mujer se puso muy mal, corrió hasta el lugar y lo vio ahí sentado con un jeans, franela blanca y botas marrones de goma con las que trabajaba. Las investigaciones preliminares dan cuenta que pudiera tratarse de hampa común, sin embargo, estaba con sus pertenencias, por lo cual, al parecer, no lo despojaron de nada.
«Llevaba dinero en efectivo pero no era mucho», comentó Chatín.
Fue conductor de bus
Mendoza Rodríguez trabajaba en el estado Aragua como conductor de autobuses y trasladaba pasajeros hacia Valencia, San Felipe, San Juan de los Morros y otras ciudades.
El ahora occiso, era el menor de dos hermanos. El mayor reside en Barquisimeto. «Él era bueno, servicial, le gustaba cocinar, era un buen hombre… No se metía con nadie, no sé qué pudo haberle pasado… espero se haga justicia y que quien lo hizo dé la cara para que pague», dijo la dama mientras las lágrimas expresaban su dolor.
Al sitio del homicidio se apersonaron los funcionarios del Eje de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas de Lara, quienes rápidamente hicieron las experticias correspondientes y levantamiento del cadáver.
Esta es la segunda víctima de asesinato en el municipio Crespo durante el fin de semana.
Fin de semana
Un total de ocho asesinatos se cometieron en el estado Lara durante el fin de semana. Destaca el asesinato de un oficial de la Policía Nacional Bolivariana, Sergio Yajure, este domingo en la mañana en las adyacencias de su rancho en la invasión Ezequiel Zamora de Las Clavellinas. Las investigaciones por este caso continúan a fin de determinar lo ocurrido.
Otro de los casos, que aún no se ha resuelto, es el de Alí José Durán Durán, de 18 años, a quien encontraron con un disparo en su humanidad en medio de una carretera en el muncipio Crespo. Al lado del cadáver estaba una pistola, por lo cual las indagaciones persisten para determinar si lo mataron o se suicidó.
William Launter Sira Rodríguez, Ronal Eduardo Romero, Yonathan Jesús Mateo, Jorge Luis Canelón y Denny José Blanco Cordero, fueron ultimados este fin de semana. Todos los hechos fueron cometidos con armas de fuego.