El incremento salarial de 15% aprobado por el presidente de la República, Nicolás Maduro, se trata definitivamente de una medida impopular que no fue consultada por las bases sindicales, ni mucho menos la clase obrera.
Dicho pronunciamiento fue realizado por el coordinador de la Unión Nacional de Trabajadores (Unete), Servando Carbone, quien consideró el incremento salarial como desventajoso en relación al 45% de aumento que benefició a los miembros de la Fuerza Armada Nacional.
“Si bien no cuestionamos las reivindicaciones de los militares, es necesario que se mejoren las condiciones de los trabajadores del sector público de acuerdo al escenario actual de inflación que atraviesa el país. Se necesitan de medidas complementarias, que al parecer no han sido revisadas, para mitigar la inflación porque el sueldo se vuelve sal y agua. ¿Cuánto cuesta el pan de jamón que los venezolanos se comerán este diciembre? ¿Alrededor o por encima de los 500 bolívares?”, como la primera de varias interrogantes. Denunció que el Gobierno nacional prometió iniciar el pago del 15% a partir del primero de diciembre, sin embargo, algunos trabajadores de instituciones públicas todavía no han recibido los aumentos decretados en lo que va de año.
“¿A partir de cuándo se va a recibir ese ajuste del 1° de diciembre, si los compañeros de alcaldías y gobernaciones no se les ha hecho efectivo los ajustes de salario mínimo correspondiente a este año?”, continuó Carbone, quien señaló que solicitarán por distintos medios al presidente Nicolás Maduro la reconsideración de esta medida.
“Pedimos al Gobierno que se reúna con la clase trabajadora, pues mientras sigan tomando decisiones sin tomar en cuenta el sentir del pueblo seguirán recibiendo el rechazo de la gente, que pide mejoras”, dijo.