Las alarmas se encendieron en el liceo Carlos Gil Yépez, cuando un estudiante de dicha institución recibió un disparo en la cabeza, cerca de las 3:30 de la tarde de este jueves, en el interior de uno de los baños de dicho plantel y falleció en la noche en el Hospital Antonio María Pineda.
Información policial indica que se trató de un adolescente, de 12 años de edad, residenciado en el sector 3, calle 5, de la urbanización Ruezga Norte, quien pese a que ayer tenía libre, se trasladó hasta el liceo y vestía el uniforme azul, correspondiente al curso de séptimo año, sección G, 2014-2015.
De acuerdo a comentarios, al momento del suceso se hallaban dentro del baño un grupo de muchachos, al parecer, alumnos, y se presume que uno de ellos habría accionado en dos oportunidades lo que pudo haber sido un revólver.
Se conoció extraoficialmente que el proyectil se le quedó alojado en la cabeza al adolescente, mientras otra bala presentó deformaciones y cayó en el piso del baño.
Al enterarse de lo ocurrido, docentes solicitaron ayuda de una ambulancia para auxiliarlo, pero fue su padre quien llegó al plantel y con la urgencia del caso lo trasladó en un vehículo particular hasta la emergencia del Hospital Central Universitario Dr. Antonio María Pineda, donde le ordenaron le realizaran una tomografía.
A los pocos minutos lo ingresaron al Hospital Universitario Pediátrico Dr. Agustín Zubillaga, en el que se supo fue sometido a una intervención quirúrgica dado su delicado estado de salud.
Cabe destacar que efectivos policiales, adscritos al Cuadrante 23, se apersonaron al Carlos Gil Yépez para resguardar el área hasta que llegara una comisión del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, a levantar las evidencias y comenzar las averiguaciones de rigor.
Docentes sólo hicieron comentarios de lo sucedido, sin formalizar declaraciones a este periódico.
Se les escuchó decir que ayer fue el primer día de clases, ya que llevaban dos semanas impartiendo charlas educativas y de formación familiar a los alumnos para concientizarlos en valores, y para que se adaptaran al nuevo proceso académico.
Entre todos lamentaron este hecho sangriento, más cuando la víctima se trata de un adolescente que apenas comenzó su primer año, en la modalidad de educación básica.
Los educadores aseguraron desconocer las causas y el autor del disparo, y prefieren que sean las autoridades que lo descubran para que se haga justicia.
Es la primera vez que en el Carlos Gil Yépez ocurre una situación como esta, afirmaron, al tiempo que algunas docentes derramaban lágrimas.
