El alcalde de Iribarren, Alfredo Ramos, dispuso la atención inmediata a las familias afectadas por el desbordamiento de dos lagunas, que generó la crecida de la quebrada de Parra en Río Claro, la madrugada del miércoles, debido a las fuertes precipitaciones registradas en esta población, que dejaron viviendas anegadas.
Funcionarios del Cuerpo de Bomberos de Iribarren atendieron el llamado de los habitantes del sector El Cementerio y acudieron con una unidad de rescate y cinco funcionarios.
El comandante de ese componente de seguridad, mayor (B) Edixon López, informó que hace un mes realizaron una inspección en el sitio y advirtieron a los habitantes sobre el riesgo que corrían y, sin embargo, hicieron caso omiso. Dos familias resultaron damnificadas y personal de la alcaldía de Iribarren los sacó del área afectada, los puso a resguardo y les brindó asistencia médica, colchonetas y alimento. El jefe de los Bomberos informó que anoche se produjo otra crecida de la quebrada y lograron convencer a 22 familias que tienen sus viviendas adyacentes a este cauce natural de que debían desalojar.