Conmovidos quedaron los habitantes de la carrera 16 entre calles 28 y 29 de Barquisimeto, cuando la mañana de este sábado se percataron que José Alvarado, de 49 años, mejor conocido como El Merejo, fue asesinado de un golpe en la cabeza. Presuntamente con una lámina de cemento.
Según los vecinos, el hombre tenía aproximadamente cuatro años viviendo como indigente en una de las calles de la Plaza Wohnsiedler, ubicada justo al frente del Santuario La Paz.
Cuentan que el hombre era consumidor de drogas pero que además la vendía en el lugar. “Llegaban muchos jóvenes a comprar y a consumir. Anoche (el viernes), lo vi llegar, estaba con dos hombres a eso de las 10:00 pm., uno alto y otro bajo. Uno de ellos vestía camisa blanca y llevaba puesto un bolso negro cruzado”, narró una de las moradoras del sector quien se resguardó en el anonimato.
“En la madrugada se escucharon muchos gritos, como una discusión, pero era ya casi que normal”, explicó. “En la mañana, cuando salimos de las casas, nos dimos cuenta que El Merejo estaba muerto”.
Dicen que no se metía con los vecinos de la zona, pero últimamente estaba violento con las demás personas. “Hace como 15 días tuvimos que llamar a la Guardia Nacional Bolivariana y vinieron a hablar con él y unos hombres que estaban ahí porque no dejaban el alboroto. Ya estaba muy grosero”.
Al sitio del suceso se apersonaron los funcionarios del Eje de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas del estado Lara, quienes recabaron algunos elementos necesarios para iniciar las averiguaciones. Quienes no aparecieron fueron los familiares del occiso.
Al parecer, sus allegados viven en Cabudare y otros parientes en la carrera 15 con calle 45.
Inseguridad se adueña del sitio
La oscuridad reina apenas cae la tarde. No hay una lámpara en buen estado, lo cual sirve de apoyo a la delincuencia para cometer sus fechorías.
“Desde hace poco más de dos años la inseguridad reina por aquí. A las 6:30 de la tarde nos encerramos porque hay muchos arrebatones”, expresan las personas.
Han denunciado ante Corpoelec, incluso, detrás de la Plaza Wohnsiedler funciona el sindicato de la empresa al cual le han pedido colaboración, pues también se beneficiaría “pero ha sido imposible nos coloquen aunque sea un bombillo. La gente que viene a misa también corre peligro y nadie hace nada”.
El patrullaje policial es nulo, denuncian los vecinos. “Vivimos pidiéndole a Dios y San Miguel Arcángel para que nos proteja de la delincuencia”.
También hicieron un llamado a Emica, organismo de la Alcadía de Iribarren, a fin de que los ayuden con la limpieza y acondicionamiento del sector que además serviría de esparcimiento para las personas.
En Cabudare, fue asesinado Jorge Luis Rodríguez Campos, a quien ultimaron de múltiples impactos de proyectiles en el caserío El Tereque.
