La situación originada por la decisión del Ministerio de Educación de despedir a miles de docentes o trabajadores educacionales en todo el país bajo el argumento de una necesaria auditoría, también llevó a una declaratoria de emergencia en el municipio Torres.
En esa entidad serían más de 700 los educadores, administrativos y obreros que han sido dejados cesantes, responsabilizando al coordinador municipal educacional, José Gil, de haberlos engañado para cuidar su puesto y quedar bien con el ministro.
Este martes, un grupo considerable de los afectados, aparentemente en su mayoría afectos al oficialismo, realizaron una caminata por varios sectores de Carora, llevando adelante un burro que, según los manifestantes, era el funcionario señalado.
Además del equino llevaban una Bandera Nacional, algunas pancartas y desde un equipo de sonido montado en un camión 350, se escuchaba la voz del presidente Chávez y algunas canciones relativas al proceso.
“Yo tengo cuatro años como docente en la escuela rural de Pozo Dulce, parroquia Las Mercedes, con muchos sacrificios, sin cobrar, y ahora me dicen que estoy despedida, ¿es eso justicia social?, se preguntó Eliani Martínez.
“Yo soy docente de aula con 31 niños a mi cargo, en la escuela Carlos Alberto Sampayo, y también dicen que he quedado fuera del sistema”, afirmó Nancy Carrasco.
“Yo tengo tres años dando clases, sin cobrar, en la escuela Juan Bautista Franco y formo parte de los más de 700 docentes a quien el profesor José Gil destituyó como peones de hacienda”, manifestó por su parte Wilson Álvarez Sierralta, quien llevaba el burro por las riendas.
Denunciaron que la llamada auditoría fue manipulada por Gil y sólo se cumplió en algunas escuelas de Carora escogidas por el coordinador municipal de Educación.
El grupo se dirigió por último al Concejo Municipal. Se le concedió un derecho de palabra al Colectivo de Lucha de los Trabajadores de la Educación. En su nombre hablaron las dirigentes Carmen Milagros Pereira y Jenny Sánchez.
Pereira dijo que ya estaban cansados de mentiras por parte del profesor José Gil.
“No somos guarimberos, somos patrulleros activos, no le estamos dando la espalda a nuestro partido”, expresó, haciendo referencia al PSUV.
Jenny Sánchez se quejó de la política de terror que les estarían aplicando muchos directores “y hasta la propia jefa de la Zona Educativa, Xiomara Ascanio”.
