Lionel Messi y el Barcelona aguardan con hambre su debut en la actual Liga de Campeones, el miércoles cuando el equipo azulgrana reciba en su estadio al Apoel Nicosia.
Campeón por última vez en 2011, el Barsa ansia volver a besar la gloría europea tras el mal sabor de boca que le dejaron sus últimas eliminaciones, el global de 7-0 encajado en semifinales de 2013 frente al Bayern Munich y la caída en cuartos de final del año pasado frente al Atlético de Madrid.
Messi, que anduvo lejos de su mejor versión en ambos cruces, regresa al ruedo europeo en notable forma tras firmar dos goles en las tres primeras fechas de la liga española y facilitar tres asistencias. Activo y comprometido en el arranque de curso, el astro argentino ha participado de forma directa en cinco de los seis tantos que lleva anotados su equipo en el campeonato, que lidera con nueve puntos en las tres fechas disputadas.
Los dos últimos pases de gol de «La Pulga», el sábado en la victoria por 2-0 sobre el Athletic de Bilbao, cayeron a pies del brasileño Neymar, quien arrancó de suplente por tercer cotejo consecutivo.
«Neymar y Leo están conectados, como siempre. Tienen muchísima calidad. Son los mejores del mundo arriba y, cuando se conectan, solucionan partidos. Las sensaciones son muy buenas», opinó el martes central azulgrana Gerard Piqué.
La química entre el brasileño y el argentino se antoja una de las claves de la temporada, en que Messi ansia recobrar su condición de número uno mundial con la reconquista del trofeo al Balón de Oro que llegó a ganar cuatro veces consecutivamente.
Para ello deberá destronar al goleador del Real Madrid Cristiano Ronaldo, y ambos son conscientes de que las noches de Champions pesan especialmente en las votaciones.
Vigente campeón de la liga chipriota, el modesto Apoel enfrenta no solo al ilimitado potencial del Barsa, sino la inquietante perspectiva de que Messi se haya trazado objetivos adicionales, como erigirse en el máximo goleador de la historia del torneo continental.
Las 67 dianas europeas de «La Pulga» le sitúan a solo cuatro del récord absoluto del ex madridista Raúl González; aunque Cristiano es el mejor posicionado con 68 tantos en su cuenta particular.
Existen pocas dudas sobre la capacidad de ambos astros de establecer una nueva marca esta misma temporada, y Messi tiene una gran oportunidad de dar un golpe sobre la mesa a la primera ocasión ante el equipo chipriota, el rival teóricamente más débil del grupo F que también integran el Ajax y el Paris Saint Germain.
El Apoel alcanza el choque tras un sobresfuerzo en la liga doméstica, pues el sábado debió esperar al minuto 88 para doblegar 1-0 al Ermis Aradippou con gol del irlandés Cillian Sheridan. El técnico Giorgios Donis apenas reservó jugadores en ese partido, aunque se prevé que el lateral John Arne Riise cause baja para enfrentar al Barsa.
Messi empezó como un trueno la pasada Champions, anotando un triplete ante el Ajax, que fue arrollado por 4-0 en visita al cuadro culé que entonces dirigía el argentino Gerardo Martino. Pero el actual técnico Luis Enrique, debutante con los azulgranas en la competición internacional, necesita que surjan nuevas variantes ofensivas a lo largo de la temporada; en especial mientras espera la incorporación del uruguayo Luis Suárez, sancionado hasta el 24 de octubre.
«Leo seguirá metiendo goles, además de asistencias. Lo ha hecho siempre y nos sigue maravillando. Pero trabajamos para tener otras soluciones, no ser previsibles y depender de una sola cosa. Creo que ya se han visto variantes. Neymar es un jugador espectacular, ya jugó bien el año pasado. Ojalá este lo haga lo mejor. Ese es mi objetivo», ponderó Luis Enrique, quien también avisó de la peligrosidad del rival. «Ganar es objetivo prioritario. Ellos dominan el juego largo y la estrategia. Si no somos intensos, podemos sufrir».
El timonel no quiso desvelar si el chileno Claudio Bravo, invicto en el arco en la liga, sería también titular el miércoles.
El Apoel nunca ha ganado de visitante en la fase de grupos de la Champions y, como su homólogo, Donis también debuta en la competición.