Planteamientos – Politicismo e Informe Dagong

Cuando escribimos “un Modelo Político para la Gerencia Pública en Venezuela”, iniciándose la gestión gubernamental actual, sobre la base del Proyecto de País consagrado en la nueva Constitución, analizamos la tesis de la “primacía de lo político”, en el contexto propio de esa época. Los Lineamientos Generales para el Desarrollo Económico y Social de la Nación (2001- 2007), tradujeron, desde el punto vista de la planificación un esfuerzo importante acerca de cómo debía conducirse la economía venezolana para efectos de un impacto importante en lo social. Por lo menos, desde el punto de vista técnico y en retrospectiva.
La confrontación entre el denominado “proyecto hegemónico” y el “proyecto contrahegemónico” ha sido un rasgo predominante a lo largo del trayecto histórico recorrido. En gran medida la política económica ha estado supeditada a las coyunturas políticas que se suceden y, dentro de estas, los eventos electorales. Lo que podría considerarse como expresión del politicismo. Similar al rentismo. Pero, esa política económica hoy luce agotada e insuficiente para dar respuestas a las demandas de la población. Y, no obstante, el politicismo se mantiene como prioridad, ahora alrededor de la “guerra económica”, sin negar que siempre haya sido parte del problema.
De las cinco tesis expuestas por el presidente Maduro en el reciente Congreso del PSUV, en una de ellas se refirió a que la tarea más importante de la Revolución Bolivariana en la nueva etapa es el desarrollo de una economía productiva socialista. Cuando muchos creyeron que en la agenda de discusión estaban los resultados de la política económica, la incertidumbre generalizada y la búsqueda de respuestas, se condensó en lo ideológico y político. Pese a que para ese momento el Informe de Dagong era conocido y, además, coincidía con la visita del  presidente de China al país, casi dos semanas después de su publicación el 1 de julio. Nada casual, pudiera pensarse, desde la óptica de un inversionista.
La Dagong Global Credit Rating Co., es una agencia de calificación de riesgo china creada en 2009, radicada en Pekín y adscrita al Banco del Pueblo de China, el equivalente al Banco Central de Venezuela, y decidió rebajar la calificación de la deuda venezolana de BB+ a BB- con “panorama negativo”.Entre sus argumentos esgrime que: “serios desequilibrios macroeconómicos arrastrarán a Venezuela a la recesión en el corto plazo y exacerbarán el riesgo de intranquilidad social. Su gran déficit fiscal, insuficientes reservas internacionales y la presión de la significativa devaluación de la moneda local contribuyen a una evidente tendencia de decrecimiento en moneda local y extranjera para el gobierno”.
En materia de política económica, al gobierno le cae el sol en la espalda.